La Romería de Zapopan tiene su origen en 1734 y está profundamente vinculada a la historia religiosa y cultural de Jalisco. La tradición nació cuando la imagen de la Virgen de Zapopan fue llevada desde la Basílica de Zapopan hasta Guadalajara con el propósito de interceder en tiempos de calamidades, como tormentas, plagas y epidemias. Desde entonces, la imagen realiza visitas anuales a diferentes parroquias durante la temporada de lluvias, como símbolo de protección, incluso es llevada a Chapala.

En su recorrido final, que se lleva a cabo cada 12 de octubre, la Virgen es llevada de vuelta a su santuario en Zapopan desde la Catedral Metropolitana de Guadalajara, acompañada por miles de fieles que participan en esta peregrinación. La romería es vista como un acto de devoción y fe, y a lo largo de los siglos ha ido evolucionando en tamaño e importancia hasta convertirse en un evento masivo, reconocido internacionalmente.

Esta celebración fue declarada Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO en 2018, lo que ha reforzado su valor cultural y religioso no solo en la región, sino a nivel mundial.

El recorrido abarca aproximadamente 9 kilómetros, con cientos de miles de feligreses acompañando a la Virgen durante su traslado, tal como ha sido costumbre desde hace siglos. La ruta incluye paradas y momentos importantes, como la salida desde la Catedral de Guadalajara alrededor de las 6:00 a.m., pasando por avenidas principales como Alcalde, Hidalgo, y Américas, hasta llegar a la Basílica en Zapopan, donde la Virgen es recibida con una gran ceremonia religiosa y actos culturales que marcan el cierre del evento.