En el set de Game of Thrones, Kit Harington (Jon Snow) encontró la fama mundial, tras la serie, sin embargo, durante el transcurso de la producción, el actor reconoció que enfrentó retos importantes que hasta hoy en día los recuerda con el fin de mejorar en su trabajo.

Uno de ellos, se dio a conocer por el actor junto a Bella Ramsey, (Lyanna Mormont) durante esta semana y recordaron su primer encuentro. Kit relató que en ese momento Ramsey, tenía entre 11 y 14 años durante la grabación y recordó cómo en una escena crucial ella tuvo que ayudarle a recordar sus líneas ,y aunque en aquel momento actuó con inocencia, ahora reflexiona sobre lo ocurrido con cierto remordimiento.

Agregó que durante la grabación, Harington agradeció la ayuda de su joven colega y a pesar de que para él fue una experiencia humillante, reconoció que la situación le motivó a mejorar, al darse cuenta de que se había vuelto demasiado cómodo con su personaje de Jon Snow.

“No sé si recuerdas esto, pero yo lo recuerdo vívidamente y ahora siento cierto remordimiento por eso… Durante esa escena te ‘soplé’ tus líneas”, contó la actriz.

Inmediatamente, Bella explicó que cuando le repitieron la escena, porque el actor parecía no recordar el diálogo, decidió decírselas en voz baja. “Ahora pienso: ‘¡Dios mío, qué horror!’. Pero en ese momento, con mucha inocencia, pensé: ‘Kit está teniendo dificultades con su diálogo y lo sé, así que déjenme recitarlo’”.

Harington de manera risueña intervino y dijo “Recuerdo que me ayudaste y que fue bastante humillante. Pero sí, gracias por eso. Probablemente, había decidido olvidarlo”. Su comentario hizo que su colega se viera obligada a pedirle disculpas por haber sido molesta, pero esa no era la intención del actor. “Para nada. En realidad, pensé: ‘Dios mío, tengo que mejorar.

Ambos actores, quienes ahora encabezan series populares en Max, hablaron sobre sus reservas respecto al éxito y la fama, una preocupación que Ramsey compartió cuando aceptó protagonizar The Last of Us.

El reto de la fama

Harington, quien tras Game of Thrones ingresó a rehabilitación debido a adicciones y pensamientos suicidas, encontró en su esposa, Rose Leslie, un apoyo fundamental y ambos actores concluyeron que, aunque la fama puede ser abrumadora, su duración es pasajera si no se busca activamente mantenerla.

En definitiva, el encuentro entre Harington y Ramsey no solo marcó un hito en su relación profesional, sino que también les permitió reflexionar sobre el impacto de la fama y el aprendizaje personal durante su tiempo en Game of Thrones.

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