El megacohete Starship de SpaceX, la imponente nave espacial clave para los planes de colonización marciana de Elon Musk, ha despegado en su más reciente vuelo de prueba desde Texas. Este lanzamiento se produce tras dos intentos anteriores que culminaron en explosiones, lo que mantenía la expectativa sobre el desempeño de este nuevo test.

La colosal nave de 123 metros de altura, el vehículo de lanzamiento más grande y potente jamás construido, encendió sus motores alrededor de las 18:36 horas (tiempo local) desde las instalaciones de Starbase, cerca de un pueblo en el sur de Texas. Decenas de curiosos se congregaron en puntos cercanos, como el Parque Isla Blanca, para presenciar el evento.

Este vuelo representa el noveno intento de prueba para Starship, luego de los espectaculares fallos de enero y marzo que generaron explosiones en la atmósfera y dispersión de restos sobre el Caribe. En aquellos intentos, la primera etapa del cohete logró un regreso controlado a la plataforma, una maniobra distintiva de SpaceX. Sin embargo, la etapa superior no sobrevivió en ambas ocasiones, lo que llevó a investigaciones y ajustes en los protocolos.

A pesar de que cuatro de los ocho vuelos de prueba previos terminaron en explosiones, SpaceX confía en su agresiva estrategia de pruebas para alcanzar el éxito, tal como lo ha hecho en el ámbito de los vuelos espaciales comerciales. La compañía reconoció que el progreso no siempre es lineal, pero su determinación se mantiene firme.

Recientemente, la Administración Federal de Aviación (FAA) aprobó un aumento significativo en la frecuencia de lanzamientos anuales de Starship desde su base en Texas, pasando de cinco a 25, tras una exhaustiva evaluación ambiental. Para este lanzamiento en particular, la FAA coordinó directamente con autoridades de Reino Unido, Islas Turcas y Caicos, Bahamas, México y Cuba, ampliando la zona de cierre del espacio aéreo a 1,600 millas náuticas hacia el este del sitio de lanzamiento.

Siguiendo la trayectoria de misiones anteriores, la etapa superior de Starship intentará completar una vuelta alrededor del mundo para luego amerizar en el Océano Índico. Una novedad importante en este vuelo es el intento de despliegue de una carga útil por primera vez: maquetas de los satélites de internet Starlink, aunque se espera que estas se desintegren en la atmósfera durante el proceso.

Otro hito significativo es la reutilización de una primera etapa que ya había volado y sido recuperada, un paso crucial hacia el objetivo de SpaceX de lograr una reutilización completa de sus cohetes, lo que podría revolucionar el acceso al espacio al reducir drásticamente los costos.