En medio de un escenario político marcado por la violencia, las elecciones presidenciales de México en 2024 se llevarán a cabo tras un año especialmente violento contra los políticos del país.

Según el informe publicado por la consultora Data Cívica, México cerró el 2023 con un alarmante número de 574 hechos de violencia perpetrados por grupos de la delincuencia organizada. Lo que representa la cifra más alta en los últimos cinco años.

Data Cívica, en su reporte denominado «Votar entre Balas: Entendiendo la violencia político criminal en México», incluye en sus cifras tanto a víctimas de violencia política asociada al crimen organizado como a funcionarios y elementos de seguridad pública atacados fuera de sus funciones.

El informe revela que el año 2023 ha sido especialmente violento, superando los 486 casos registrados en el año anterior. Entre los estados más afectados se encuentran Guerrero, Guanajuato, Zacatecas, Veracruz, Michoacán y Chiapas, donde se concentra la mayor cantidad de eventos violentos.

Durante el mes de diciembre, se registraron 42 eventos asociados con violencia político-criminal, que engloban atentados, secuestros, ataques armados y asesinatos. Estos hechos ocurrieron en estados como Zacatecas, Michoacán, Guerrero, Oaxaca, Baja California y Puebla. Así como en Chiapas, Colima, Sinaloa, Chihuahua, Ciudad de México, Quintana Roo, Estado de México y Veracruz.

Desde 2018 hasta 2023, se han registrado un total de 1,610 ataques, asesinatos, atentados y amenazas contra personas vinculadas con la política, el gobierno o las instalaciones gubernamentales y de los partidos políticos. Durante este mismo periodo, 105 candidatos, aspirantes y excandidatos han sido asesinados.

El informe de Data Cívica destaca que durante los primeros días de enero de 2024, ya se ha reportado el asesinato de tres precandidatos y una aspirante a cargos municipales. Así como una precandidata al Senado de la República. Estos hechos ocurrieron en Chiapas, Colima, Morelos, Michoacán y Ciudad de México.

Es importante destacar que algunas de las víctimas pertenecían a partidos políticos opositores como el PAN, el PRI, el PRD y el Movimiento Ciudadano. Mientras que una más era del partido oficialista Morena.

En las elecciones presidenciales de 2018, México registró 774 ataques contra políticos con un saldo de 152 muertos. Incluyendo 48 aspirantes. En 2021, los comicios fueron aún más violentos, con 1,066 ataques y 102 fallecidos, 36 de ellos candidatos.

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