¿Qué pasa si un candidato no se asiste al tercer debate presidencial?
17/05/2024 - Hace 6 meses en México¿Qué pasa si un candidato no se asiste al tercer debate presidencial?
Aunque no existen sanciones legales significativas para un candidato a la presidencia de la República que decida no acudir al tercer debate organizado por el Instituto Nacional Electoral (INE), los expertos coinciden en que tal decisión podría tener repercusiones políticas importantes.
La ley y los debates: Un análisis legal
Arturo Sánchez, exconsejero del INE y actual investigador y académico del Tecnológico de Monterrey, explicó que la Ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales, en su artículo 218, establece que la autoridad electoral debe organizar al menos dos debates obligatorios, lo cual ya se ha cumplido. Sin embargo, el tercer debate, aunque acordado por los partidos y organizado por el INE, no implica una obligación legal para los candidatos de asistir.
‘Esto no quiere decir que los candidatos necesariamente estén obligados a acudir; ese es un tema diferente y no veo que esté prevista una sanción a algún candidato que no vaya… sabemos que el candidato que va adelante en las encuestas, pues no le interesa exponerse en un debate, tiene más que perder que ganar pero es, políticamente, bastante incorrecto’, detalló Sánchez.
Repercusiones políticas de no asistir al tercer debate
Fernando Dworak, analista y consultor político, comentó que la ausencia de un candidato en un debate podría tener diversas repercusiones, dependiendo de varios factores, como su posición en las encuestas y la percepción pública de su imagen.
Asimismo, Dworak explicó que en el actual proceso, si Claudia Sheinbaum, candidata del oficialismo, o Xóchitl Gálvez, abanderada de la coalición Fuerza y Corazón por México, decidieran no acudir al tercer evento organizado por el INE, podría ser un arma de doble filo.
Por su parte, Eduardo Huchim, exconsejero del Instituto Electoral del DF (ahora IECM), comentó que, si alguna de las candidatas, como Claudia Sheinbaum o Xóchitl Gálvez, decidiera no asistir, el debate perdería interés y sentido. Además, detalló que, a pesar de que ambas aspirantes han experimentado ligeras bajas en su popularidad tras los dos primeros ejercicios, estos descensos son irrelevantes y caen dentro del margen de error.
Precedente histórico: El caso de AMLO en 2006
Hasta el momento, el único debate que no contó con la presencia de uno de los contendientes a la Presidencia de la República, fue el que se celebró el 2 de mayo de 2006, el primero de dos de aquel proceso electoral. En aquella ocasión, el ausente fue el candidato de la coalición Por el Bien de Todos, Andrés Manuel López Obrador, actual presidente de la República.
El INE, presidido entonces por Luis Carlos Ugalde, decidió realizarlo con la participación de Felipe Calderón Hinojosa, aspirante del PAN; Roberto Madrazo, de la Alianza por México; Patricia Mercado, del Partido Socialdemócrata, y Roberto Campa, abanderado por el partido Nueva Alianza.
Fernando Dworak recordó que esta decisión generó presión y un costo político al tabasqueño, aunque no afectó gravemente su campaña. ‘La clave está en cómo se maneja la narrativa. Un candidato puede justificar su ausencia de manera que resuene positivamente con su base de apoyo’, explicó.
Finalmente, aunque no existen sanciones legales para los candidatos que decidan no asistir al tercer debate, las repercusiones políticas pueden ser significativas. La decisión de ausentarse debe ser cuidadosamente considerada y comunicada para minimizar cualquier impacto negativo en la percepción pública y la intención de voto.
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