La precandidata de la coalición opositora Fuerza y Corazón por México, Xóchitl Gálvez Ruiz, expresó su inconformidad con la decisión de programar los tres debates presidenciales en la Ciudad de México. Además, lamentó que solo dos de estos sean obligatorios, planteando la necesidad de que los tres encuentros sean de carácter obligatorio para todos los candidatos.

Las inconformidades de Xóchitl Gálvez con los debates

Gálvez propuso un formato de debates más flexible, alegando que los actuales son aburridos para la audiencia. Enfatizó la necesidad de eliminar reglas estrictas que limiten la participación de los candidatos, permitiendo interrupciones y más tiempo para desarrollar sus ideas. La precandidata sugirió que los debates sean menos estructurados y más interactivos para garantizar un diálogo dinámico y enriquecedor.

Por otro lado, Xóchitl Gálvez manifestó su preocupación por la concentración de los debates en la Ciudad de México, señalando que esto ignora la existencia y las realidades del sur y norte del país. Propuso que los debates se realicen en diferentes regiones, asegurando así que la diversidad geográfica y las problemáticas específicas de cada zona sean abordadas en los encuentros.

Retos lanzados a Sheinbaum: debate sobre seguridad y transparencia

La precandidata de Fuerza y Corazón por México lanzó un reto a la precandidata presidencial de Morena, Claudia Sheinbaum, proponiendo un debate esta misma semana. Gálvez destacó la importancia de que los mexicanos vean a dos mujeres discutir sobre temas cruciales como la seguridad, la salud y la corrupción. Además, retó a Sheinbaum a abordar cuestiones delicadas, como los negocios del presidente y la supervisión del Tren Maya.

Xóchitl Gálvez propuso un debate sin restricciones, sugiriendo que se lleve a cabo en un programa de radio para garantizar una conversación franca y directa. Invitó a Sheinbaum a participar en este encuentro, donde ambas candidatas podrían discutir sin limitaciones, abordando preguntas y cuestionamientos directos.

La posición de Xóchitl Gálvez refleja la necesidad de replantear la dinámica de los debates presidenciales, buscando un formato más inclusivo, descentralizado y dinámico. Destacó que su desafío a Claudia Sheinbaum no solo es un llamado al diálogo sino también a la transparencia y la apertura en la discusión de temas que preocupan a la sociedad mexicana.

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