La actriz mexicana compartió entre lágrimas uno de los logros más significativos de su vida: terminar la preparatoria con promedio de 9.5. Su historia ha inspirado a miles en redes sociales.

Natasha Dupeyrón, reconocida actriz y activista mexicana, demostró que nunca es tarde para cumplir un sueño pendiente. A sus 33 años, la también modelo sorprendió a sus seguidores al anunciar que finalmente terminó la preparatoria, y lo hizo con una calificación sobresaliente: 9.5 de promedio. La noticia no solo emocionó a sus fans, sino que se volvió viral debido al emotivo video donde rompió en llanto mientras sostiene su certificado oficial.

La publicación en su cuenta de Instagram se llenó rápidamente de comentarios llenos de admiración y aplausos. Entre lágrimas, Natasha compartió que durante muchos años pensó que no era buena para estudiar, e incluso, que le daba miedo hacer preguntas o quedar como ignorante. Esa inseguridad la acompañó desde niña y fue uno de los mayores obstáculos que enfrentó a lo largo de su vida académica.

Una historia de superación con sabor a matemáticas

"Hoy recibí mi certificado de preparatoria. ¡Con 9.5 de promedio!", escribió en sus redes junto a una serie de fotos de su infancia. Pero más allá de la nota, lo verdaderamente significativo fue el camino que recorrió para llegar hasta ahí.

En su publicación, Natasha relató que años atrás intentó estudiar música, una de sus grandes pasiones, pero fue rechazada por no haber concluido la preparatoria. Aquel momento le rompió el corazón y la dejó con una profunda sensación de fracaso. "Me sentí sin opciones. Con una autoestima tan bajita que me convencí de que nunca iba a poder", confesó.

Fue hasta que acudió a terapia, como ella misma explicó, que comenzó a sanar esas heridas del pasado y se atrevió a enfrentar lo que siempre le había dado miedo: volver a estudiar. Contra todo pronóstico, no solo logró avanzar en sus materias, sino que descubrió una nueva pasión inesperada: el álgebra.

“¡Me encantan las matemáticas! No lo puedo creer, pero sí. Me sentí capaz, me sentí fuerte y sobre todo… me sentí libre”, expresó con emoción.

En el video viral que compartió en Instagram, se pudo ver a Natasha recibiendo el sobre oficial con su certificado. Lo abrió lentamente, miró su nombre impreso, lo sostuvo entre sus manos y rompió en llanto. Un momento sincero y profundo que tocó el corazón de miles de personas que han vivido —o temido vivir— una experiencia similar.

“Me daba miedo estar en una reunión y que hablaran de cosas que yo no entendía. Me daba miedo fallar, me daba miedo preguntar. Hoy ya no tengo ese miedo”, añadió.

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