¿Sientes que hay personas que apagan tu energía? Este ritual podría ser la respuesta que estabas buscando.

En un mundo donde las relaciones humanas forman la base de casi todos los aspectos de la vida desde lo laboral hasta lo íntimo es inevitable cruzarse con personas cuya presencia resulta abrumadora, drenante o incluso dañina. Estas personas, comúnmente denominadas “tóxicas”, no siempre son fáciles de identificar, pero su impacto emocional y energético puede ser profundo. Frente a esto, un antiguo, pero efectivo ritual comenzó a ganar popularidad por su capacidad para ayudarte a cortar esos lazos oscuros y recuperar tu equilibrio interior.

¿Qué es una persona tóxica y por qué debemos protegernos?

El término "persona tóxica" ganó notoriedad en los últimos años debido al auge del interés por la salud mental y el bienestar emocional. A diferencia de lo que muchos creen, una persona tóxica no necesariamente tiene malas intenciones, pero su forma de actuar a través del drama, la manipulación, la crítica constante o la victimización contamina el entorno emocional. Lo más peligroso es que muchas veces se presentan como amistades, parejas o familiares cercanos, lo que hace aún más difícil reconocerlas y alejarse de ellas.

Estas personas drenan energía vital, alimentan la inseguridad y, en casos extremos, afectan directamente la salud física y emocional de quienes las rodean. En este contexto, diversas corrientes de espiritualidad y bienestar recomiendan realizar rituales energéticos como una forma de protección personal.

Un ritual de protección lleno de simbolismo

Este ritual no es mágico ni promete soluciones instantáneas, pero sí ofrece una herramienta poderosa para liberar emociones negativas, establecer límites saludables y reconectar con tu fuerza interior. Se trata de una práctica espiritual que, combinada con intención consciente, puede ayudarte a cerrar ciclos dañinos y crear un escudo de energía positiva a tu alrededor.

Materiales que vas a necesitar:

• 1 vela blanca: simboliza la pureza, la luz y la protección divina.
• 1 espejo redondo pequeño: representa el alma y sirve como reflejo y escudo.
• Incienso de sándalo o copal: limpia el ambiente de energías densas.
• 1 vaso con agua y sal marina: la sal purifica y el agua absorbe la energía negativa.
• 1 hoja blanca y una pluma azul: para expresar, liberar y decretar.
• Canela (en polvo o en raja): atrae energía positiva y sella con amor.
• Tu perfume favorito: para reconectar con tu poder personal.
• 1 cuarzo rosa o amatista: ambos con propiedades de sanación y protección.

Paso a paso del ritual:

1. Crea tu espacio sagrado:

Busca un lugar tranquilo y realiza este ritual al anochecer. Limpia el lugar encendiendo el incienso y pasándolo por cada rincón. Respira profundo.

2. Activa tu intención:

Enciende la vela blanca y di en voz alta:

“Enciendo esta luz para alejar toda sombra que no me pertenece. Soy luz. Soy amor. Soy protección divina.”

3. Escribe tu carta de liberación:

En la hoja blanca escribe el nombre de la persona o personas que sientes que te afectan. Describe cómo te hacen sentir y qué deseas cortar. Finaliza con:

“Te libero, te perdono y me libero.”

4.Ritual del espejo:

Mírate unos segundos en el espejo. Luego colócalo frente a la vela para que refleje la luz. Imagina cómo esa luz te envuelve y te protege.

5. Purificación con agua y sal:

Coloca el vaso al lado del espejo y pronuncia:

“Toda energía que no es mía, que no me pertenece, regresa al universo para su transmutación.”

6. Sello de poder con canela:

Espolvorea canela alrededor del vaso y el espejo formando un círculo. Esto atraerá energías positivas y reforzará tu campo protector.

7. Reafirmación con perfume:

Rocía tu perfume favorito sobre ti y sobre los elementos. Declara:

Me reconecto con mi esencia. Soy energía pura. Mi campo está sellado.”

8. Meditación con el cuarzo:

Toma el cuarzo elegido, colócalo sobre tu pecho y medita por al menos 7 minutos. Visualiza cómo la negatividad abandona tu cuerpo y se transforma en luz dorada.

9.- Cierre energético:

Quema la hoja (en un recipiente seguro) o rómpela y entiérrala lejos de tu casa. Agradece en silencio y apaga la vela sin soplarla.

El poder está en ti

Este ritual no sustituye un trabajo emocional profundo ni reemplaza la necesidad de poner límites claros o buscar ayuda profesional. Pero sí representa un acto simbólico y energético que puede ayudarte a decir “basta” desde un lugar de amor propio y autocuidado.

Alejarse de personas tóxicas es un derecho, no un lujo. Mereces paz, claridad y relaciones que te sumen, no que te desgasten. Este ritual es una forma de recordarte que tu energía es valiosa y que puedes protegerla.

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