Los residentes de la conocida Riviera Veracruzana, en el municipio de Alvarado, han alzado su voz contra el saqueo incontrolado de arena en las playas locales. Esta práctica ha causado alarma entre la comunidad y los ecologistas, preocupados por las consecuencias ecológicas y ambientales.

Según las denuncias, es habitual ver camiones pesados cargando arena a escasos 10 metros del mar. Estos camiones, tras la extracción, atraviesan un terreno baldío para incorporarse a la carretera que une Antón Lizardo con Boca del Río, en una actividad que los vecinos consideran un saqueo irregular.

Héctor Vélez, presidente de la mesa directiva del fraccionamiento Playa Dorada, ha compartido su inquietud con las autoridades locales, estatales y federales, sin recibir respuesta. “En los límites de nuestro fraccionamiento parece haber un saqueo irregular de arena, una explotación ilícita cerca del mar”, declaró Vélez.

Los residentes han grabado cómo los camiones se llevan la arena de forma clandestina, dejando huellas en la playa. Cuando aparecen los medios, los responsables huyen, volviendo cuando la atención disminuye.

¿Qué uso se le da a la arena robada en la Riviera Veracruzana?

Se ha identificado que la arena robada se usa para rellenar terrenos de construcción, lo que daña el ecosistema costero y amenaza especies locales, como el cangrejo azul, en peligro y protegido por organizaciones civiles.

El ecologista Miguel Ángel Barragán Villarreal ha expresado su gran preocupación por el saqueo de arena, enfatizando la necesidad de proteger las playas como parte vital del ecosistema. Ha urgido a las autoridades a actuar y proteger el patrimonio natural.

La comunidad de la Riviera Veracruzana espera que las autoridades actúen con urgencia para frenar el saqueo de arena y preservar el valioso ecosistema costero. Es imperativo actuar de inmediato para prevenir daños irreversibles a la biodiversidad y asegurar la protección de las playas para el futuro.

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