El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO) ha dejado en claro que la reforma al Poder Judicial de la Federación seguirá su curso, a pesar de cualquier intento de impugnación por parte de la oposición. En su conferencia de prensa, el mandatario aseguró que no existe ningún fundamento legal que respalde la detención de esta reforma.
López Obrador hizo hincapié en que, según la Constitución mexicana, las reformas pueden llevarse a cabo siempre y cuando sean aprobadas por mayorías calificadas en ambas cámaras del Congreso de la Unión y en la mayoría de las legislaturas locales. En este sentido, destacó que la reforma al Poder Judicial ya está en vigor y que no hay razón alguna para detenerla.
Posible intervención de la Suprema Corte
Ante la posibilidad de que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) intervenga en el proceso, el presidente señaló que la máxima autoridad judicial no tiene facultades para echar atrás la reforma.
López Obrador comparó esta situación con la emisión de una orden de aprehensión, recalcando que no le corresponde a él como titular del Ejecutivo tomar decisiones que corresponden a un juez.
En cuanto a la posible impugnación de la reforma por parte de la oposición, el presidente invitó a los constitucionalistas a expresar su opinión al respecto. Mencionó específicamente a Diego Valadés y al Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM como figuras clave para definir si se busca un Estado de derecho o uno de «chueco», en sus propias palabras.
De esta manera, el presidente López Obrador deja claro que defenderá la reforma judicial contra cualquier intento de detenerla. Con argumentos basados en la Constitución y en el proceso legislativo que la respalda, el mandatario se muestra firme en su postura de impulsar un cambio en el Poder Judicial que considere necesario para el país.
Cabe mencionar que el pasado 15 de septiembre, AMLO firmó el decreto para la publicación de la reforma al Poder Judicial en el Diario Oficial de la Federación (DOF), momento en que estuvo acompañado por la presidenta electa, Claudia Sheinbaum Pardo.
