Armerías estadounidenses demandadas por México por presunta complicidad en el tráfico ilegal de armas decidieron llevar su caso ante la Corte Suprema de Estados Unidos. Este movimiento llega después de que una corte de apelaciones determinara que la demanda debía ser retomada, desafiando la inmunidad que las armerías alegan poseer gracias a la Ley de Protección al Comercio Legal de Armas (PLCAA).

El pasado jueves 18 de abril, nombres reconocidos como Smith & Wesson, Glock, Barrett y Beretta presentaron una petición para que la Corte Suprema tome cartas en el asunto. Argumentan que la venta legal de armas de fuego no debe ser sujeta a demandas civiles, basándose en la PLCAA que ha sido utilizada anteriormente para evitar que las entidades del gobierno estadounidense y los ciudadanos del país enfrenten este tipo de situaciones legales.

México, por su parte, exige una compensación por un total de 10 mil millones de dólares, además de medidas como la prohibición de la venta de armas de asalto y cargadores de alta capacidad. El país ha señalado presuntas responsabilidades de las armerías en el comercio ilegal de armas hacia el sur, poniendo en duda la aplicación de la inmunidad que estas empresas reclaman.

Las armerías insisten en que la decisión de la corte de apelaciones va en contra de precedentes establecidos en otros casos similares, donde se descartó la responsabilidad de las empresas debido a que la «causa próxima» de los hechos es demasiado distante de la parte demandante. Argumentan que la cadena de acontecimientos desde la venta de las armas hasta su llegada a México o la comisión de delitos es demasiado extensa para que se les atribuya responsabilidad directa.

Además, señalan que la propia Corte Suprema estableció en el pasado criterios claros sobre la causa próxima en casos legales de este tipo, enfatizando la importancia de no ampliar esta causalidad más allá de los primeros pasos directos. Por lo tanto, las armerías sostienen que la corte de apelaciones ha errado al considerar una posible complicidad en el tráfico ilegal de armas por su parte, y que la PLCAA debería protegerlas de este tipo de situaciones legales.