La Arquidiócesis de León emitió un comunicado condenando el asesinato de siete jóvenes, miembros de la parroquia Nuestra Señora de Guadalupe Reyna de los Apóstoles, perpetrado la madrugada del lunes en la comunidad de San Bartolo de Berrios, municipio de San Felipe, Guanajuato. Los hechos ocurrieron al término de una celebración por el Día de las Madres.

El arzobispo Jaime Calderón Calderón, mediante un comunicado oficial dirigido «al pueblo de Dios que peregrina en estas tierras«, manifestó su rechazo al ataque armado ocurrido en la plaza pública. «Estamos indignados, consternados y condenamos este hecho», declaró el prelado. Asimismo, expresó su apoyo a los familiares afectados: «En un servidor encontrarán consuelo y oración por sus familiares y por ustedes, que sufren por estos lamentables hechos».

Según los informes iniciales, individuos armados pertenecientes a un grupo de la delincuencia organizada arribaron al lugar durante la madrugada y dispararon contra los presentes. El arzobispo Calderón puntualizó: «De acuerdo a los primeros reportes, personas de un cártel llegaron armadas y abrieron fuego arteramente contra la gente que se encontraba en el lugar, resultando muertos 7 jóvenes, entre ellos algunos menores de edad».

El jerarca católico instó a las autoridades a esclarecer el caso y detener a los responsables. «Llegar a la verdad y aplicar la justicia es un deber para dar consuelo a las familias«, afirmó. Calderón también señaló que, pese a los operativos y agrupaciones de seguridad desplegados en el estado, la violencia continúa afectando a los habitantes de Guanajuato. «En contraste con lo buena y generosa que es la mayoría de la gente que vive en estas tierras del Bajío, también soy consciente de una realidad que la fragela y la daña: la violenta disputa de territorio de los cárteles, en la cual se han perdido muchas vidas de personas inocentes», agregó.

La comunidad de San Bartolo de Berrios se encuentra bajo vigilancia mientras la Fiscalía General del Estado realiza las investigaciones correspondientes. Hasta el momento no se han reportado detenciones relacionadas con el caso. En diversos puntos del municipio han aparecido lonas con mensajes amenazantes firmadas por un grupo criminal, aunque serán las autoridades quienes determinen oficialmente el móvil del ataque.

Fuentes del Gobierno del Estado confirmaron que dos de las víctimas eran hijos del delegado rural de la comunidad de San Bartolo de Berrios. Las siete víctimas participaban activamente como miembros de la parroquia local.

Este incidente constituye el segundo ataque en 2025 contra integrantes de comunidades parroquiales en Guanajuato. El 14 de marzo del presente año, ocho jóvenes fueron asesinados en la comunidad de San José de Mendoza, municipio de Salamanca. En aquella ocasión, miembros de la Pastoral Juvenil de la parroquia local fueron atacados mientras participaban en actividades comunitarias. Posteriormente, el 19 de marzo, se realizó una misa de cuerpo presente para despedir a las víctimas.

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