Tamaulipas.- La Auditoría Superior de la Federación (ASF) ha revelado una serie de irregularidades en la modernización de la carretera Tampico-Ozuluama, lo que ha generado preocupación por un posible daño al erario federal.

Según el informe presentado por la ASF, la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) habría realizado pagos irregulares durante la obra, incurriendo en deficiencias en los controles internos de la residencia de obra y supervisión externa.

En la cuenta pública 2022, se evaluó la construcción de terracerías, obras de drenaje, pavimento de concreto asfáltico, obras complementarias y señalamiento de la carretera federal 180 Tuxpan-Tampico, en el tramo mencionado. Del total de 522.4 millones de pesos ejercidos por la SICT en el proyecto, se revisó un monto de $430.6 millones, lo que representó el 82.4% del presupuesto destinado.

La ASF examinó siete contratos de obra pública y nueve de servicios relacionados con los mismos, encontrando irregularidades que sumaron un posible daño al erario de más de un millón de pesos. La auditoría ordenó fundamentar recursos por 1 millón 119 mil 335 pesos gastados, logrando recuperar $23 mil 781 durante el proceso de revisión.

Entre las deficiencias detectadas se encontraron “pagos en exceso” por conceptos como la formación y compactación de terraplenes con material procedente de banco, así como por servicios no ejecutados en la elaboración del finiquito de los trabajos de obra.

A pesar de las irregularidades señaladas, la ASF concluyó que la SICT cumplió en términos generales con las disposiciones legales y normativas aplicables en la materia. Sin embargo, tendrán que aclarar y corregir las deficiencias encontradas para evitar posibles daños futuros al erario público.

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