Así fue el secuestro de Los Chapitos por el CJNG en 2016
El 15 de agosto de 2016, tres hijos del narcotraficante Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán, en ese momento líder del Cártel de Sinaloa, fueron víctimas de un secuestro a manos de una agrupación rival: el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
Los hechos tuvieron lugar en Puerto Vallarta, Jalisco, bastión del CJNG, donde Iván Archivaldo, hijo de ‘El Chapo’ y actual líder de Los Chapitos, celebraba su cumpleaños número 33 en el restaurante La Leche, en compañía de sus hermanos Jesús Alfredo, César y Ovidio Guzmán.
Sin embargo, la celebración se vio abruptamente interrumpida cuando un grupo armado perteneciente al CJNG ingresó al establecimiento, separó a las mujeres presentes y sometió a seis personas, entre ellas los hijos de ‘El Chapo’: Iván, Jesús y César, quienes fueron secuestrados y retenidos contra su voluntad.
Después de varios días de incertidumbre y temor, el semanario RioDoce informó sobre la liberación de las seis personas privadas de su libertad, gracias a un acuerdo que se presume fue facilitado por Ismael ‘El Mayo’ Zambada, cofundador del Cártel de Sinaloa, con el líder del CJNG, Nemesio Oseguera Cervantes, alias ‘El Mencho’.
DEA intercepta fotografías
Durante su cautiverio, los hijos de ‘El Chapo’ fueron objeto de fotografías por parte de sus captores, las cuales incluso llegaron a manos de la Administración de Control de Drogas (DEA), que tuvo acceso a imágenes que confirmaban la identidad de los secuestrados.
Estos detalles salieron a la luz a través de mensajes interceptados por la DEA, que incluían fotografías de los hermanos Guzmán enviadas entre dispositivos Blackberry.
A pesar de la sensibilidad del caso, la DEA se mantuvo al margen de las negociaciones para la liberación de los hermanos Guzmán, aunque ya tenía en su radar a Iván Archivaldo y Jesús Alfredo por su presunta implicación en actividades relacionadas con el narcotráfico.
En la actualidad, Iván y Jesús lideran la facción conocida como Los Chapitos dentro del Cártel de Sinaloa, siendo ambos objeto de recompensas millonarias por parte de Estados Unidos en caso de información que conduzca a su captura.
