CDMX.- Expertos advierten que la epidemia de obesidad en México seguirá en aumento para el año 2030, con una prevalencia que afectará a casi cuatro de cada diez personas en el país, según datos proporcionados por especialistas del Consejo Mexicano de Medicina Interna y de la Sociedad Mexicana de Nutrición y Endocrinología.
En el marco del Día Mundial de la Obesidad, la doctora Fátima Margarita Rodríguez Dávila, médica cirujana y especialista en obesidad, alertó sobre la proyección de que aproximadamente el 36.8% de la población mexicana padecerá obesidad para el año 2030, lo que representa un incremento anual del 1.6%.
La Federación Mundial de la Obesidad ha destacado el crecimiento alarmante de esta condición en México en las últimas décadas, ubicando al país en el quinto lugar a nivel mundial en cuanto a la presencia de la obesidad entre su población. Con 21 millones de mujeres (41%) y 15 millones de hombres (31%) afectados por esta condición, México enfrenta un desafío importante en materia de salud pública.
El presidente de la Federación Centroamericana y del Caribe de Obesidad y Metabolismo, Ricardo Luna, hizo hincapié en que el sobrepeso también impacta negativamente en los niños y adolescentes de Latinoamérica, donde el 33.6% de esta población se ve afectada por este problema de salud, en gran parte debido a la falta de hábitos alimenticios saludables.
La obesidad, el gran desafío de la salud para México
La obesidad, responsable de 2.8 millones de muertes por enfermedades no transmisibles en la región en 2021, es un tema preocupante para la salud pública en México, con más de 50 millones de personas afectadas, según datos de la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (Ensanut) 2022.
La falta de regulaciones en el entorno alimentario y el mayor consumo de productos ultraprocesados contribuyen significativamente a la epidemia de obesidad en el país, según la organización mexicana El Poder del Consumidor. La oposición de la industria alimentaria a implementar políticas que aborden este problema ha obstaculizado los esfuerzos para combatir la obesidad.
Por otro lado, el estigma social asociado a esta enfermedad puede dificultar el acceso a un tratamiento integral para esta condición, lo que a su vez afecta negativamente la salud mental y física de las personas afectadas. La falta de recursos, la escasez de alimentos saludables y la falta de conocimiento sobre la obesidad como una enfermedad son factores adicionales que influyen en la magnitud del problema en México.