El costo de la inseguridad y el delito en México en 2022 ascendió a 319,100 millones de pesos, marcando un incremento del 14.41% en comparación con el año anterior, según reveló la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública (ENVIPE-2023) realizada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).

Esto representó el 1.08% del Producto Interno Bruto (PIB) del país. A nivel individual, el costo promedio para las personas afectadas por delitos aumentó a 8,192 pesos, en comparación con los 7,147 pesos registrados en 2021.

De este costo total, el 61.8% se destinó a pérdidas económicas derivadas de los delitos, el 33.1% se invirtió en medidas preventivas, y el 5.1% se destinó a gastos relacionados con daños a la salud. Según la encuesta, los hogares mexicanos gastaron 105.7 millones de pesos en medidas preventivas, como cambiar cerraduras, puertas o ventanas, instalar rejas o bardas, acciones conjuntas con vecinos y comprar perros guardianes.

El robo total de vehículos fue el delito que más impacto tuvo en las finanzas de las víctimas, con una pérdida promedio de 30,308 pesos, seguido por el fraude, que podría costar hasta 14,653 pesos en promedio.

El robo o asalto en la calle o en el transporte público ocupó el tercer lugar en términos de costos, con una pérdida monetaria de 8,124 pesos por víctima.

A pesar de que el costo de la inseguridad aumentó, la cifra de delitos disminuyó en 2022, pasando de 28.1 millones en 2021 a 26.8 millones, lo que representa una disminución del 4.63%.

Sin embargo, la ENVIPE también reveló que solo el 10.9% de las víctimas presentó denuncias, y de estas, las autoridades solo iniciaron investigaciones en el 69.3% de los casos.