La dirección de Protección Civil del estado de Querétaro informó que una persona perdió la vida tras ser aplastada por una mole de tierra y lodo debido a un derrumbe en el interior de la mina El Cedro, ubicada en las inmediaciones del poblado de Río Blanco, en el municipio de Peñamiller.
Según las autoridades, policías municipales de Peñamiller llegaron rápidamente al lugar del accidente y localizaron el cadáver de una persona sin vida en el interior de la mina. Además, otros dos hombres resultaron lesionados y fueron trasladados por sus amigos y familiares al hospital general de Cadereyta para recibir atención médica.
Aún se desconoce la actividad que realizaban en la mina y si contaban con la autorización correspondiente para estar en el lugar. Elementos de la Fiscalía de justicia de Querétaro iniciaron la carpeta de investigación para esclarecer los hechos y llevar a cabo el levantamiento legal del cadáver, el cual fue enviado al Servicio Médico Forense.
Otro caso
Peñamiller, un municipio con una larga tradición en la industria minera, ha sido escenario de tragedias similares en las últimas semanas. El pasado 16 de agosto, dos personas perdieron la vida y otra más sufrió lesiones de gravedad tras un derrumbe en la mina «La Fe».
Ante la gravedad de la situación, se solicitó la intervención de personal especializado de Protección Civil Estatal para llevar a cabo las labores de rescate de los cuerpos de los mineros atrapados en el interior de la mina.
Asimismo, la Fiscalía de Justicia del estado de Querétaro se presentó en el lugar de los hechos para iniciar las investigaciones correspondientes y esclarecer las causas que llevaron al derrumbe de la mina «La Fe».
Incidente en 2016
Lamentablemente, este no es el primer incidente de este tipo que ocurre en la zona. En junio de 2016, un joven minero de 26 años de edad identificado como Gumaro Aguas García perdió la vida al quedar atrapado en la mina Cristo Vive, también ubicada en la zona.
En aquella ocasión, la falta de medidas de seguridad adecuadas y la operación clandestina de la mina fueron señaladas como factores que contribuyeron al trágico desenlace. Los pobladores de La Plazuela denuncian la presencia de diversas minas operando de forma ilegal y sin los permisos correspondientes.
Se ha señalado que los empresarios metalúrgicos, respaldados por los ejidatarios locales, operan sin medidas de seguridad adecuadas, lo que ha generado preocupación y temor entre los habitantes de la región.
