En breve… Tres miembros de la organización conocida como la Familia Michoacana fueron detenidos por su supuesta participación en el asesinato y desmembramiento de dos víctimas cuyos restos fueron dispersados en distintas ubicaciones de Toluca.

En contexto: 

• El día 5 de julio se descubrieron restos humanos colgados de puentes peatonales de manera simultánea en el Paseo Tollocan, cerca de la sede central de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEM), en la colonia Lomas Altas y en San Cayetano Morelos.
• Estos actos violentos fueron atribuidos a la organización criminal conocida como La Familia Michoacana, debido a la presencia de cartulinas que fueron colocadas en varios lugares de la región.
• Al día siguiente de los sucesos, la Secretaría de Seguridad del Estado de México (SSEM) anunció que se había llevado a cabo la detención de 4 individuos vinculados al descubrimiento de los restos humanos en Toluca y San Mateo Atenco.
• Una semana previa a los acontecimientos, se viralizó un video en las redes sociales en el cual un miembro de La Familia Michoacana, conocido como ‘Comandante Pecha’, declaró que llevarían a cabo una «limpia» en el Estado de México dirigida a los vendedores de cristal (droga).

• En otra situación, en la mañana del 10 de julio, un grupo de individuos armados provocó un incendio en la Central de Abasto de Toluca con el objetivo de quemar los cuerpos de nueve personas.
• A pesar de la naturaleza inusual de los acontecimientos, el alcalde de Toluca, Raymundo Ramírez Carbajal, indicó que las investigaciones no sugieren una conexión entre este incidente y el crimen organizado, sino que se relaciona más bien con una disputa entre comerciantes.

Mientras tanto: 

• Hasta ahora, se ha confirmado que el supuesto líder de la región en el Valle de Toluca pertenece al grupo encabezado por Jhonny Hurtado Olascoaga, conocido como El Pez, y José Alfredo Hurtado Olascoaga, conocido como El Fresa.
• Estos hermanos son considerados dos de los delincuentes más buscados en México por el gobierno de Estados Unidos. Como resultado, el gobierno mexicano ha ofrecido recompensas de hasta 500 mil pesos por cualquier información que conduzca a su captura.

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