La Navidad es una época de alegría y unión familiar, pero también es un momento en el que los casos de abuso infantil aumentan considerablemente. Según datos de la fundación Infancia Libre de Abuso Sexual (ILAS), durante las fiestas decembrinas los casos de abuso sexual infantil pueden incrementar hasta un 40%. Ante esta alarmante realidad, es necesario tomar medidas para proteger a nuestros niños y evitar situaciones de abuso.

Sofía Palacios, co-fundadora de ILAS, proporciona herramientas para proteger a niñas y niños en estas fechas. Palacios destaca la importancia de abordar el tema desde la prevención primaria, creando entornos seguros y fortaleciendo los vínculos familiares.

«Tenemos que dejar de tratar de adivinar intenciones y empezar a prestar atención en ciertos comportamientos que representan un riesgo en cuanto al trato con los niños», afirma Palacios.

Recomendaciones para evitar abuso infantil

Durante la Navidad, donde las reuniones familiares son recurrentes, es fundamental estar alerta y tomar medidas para proteger a los menores. Palacios sugiere cinco acciones concretas que podemos implementar para prevenir el abuso infantil:

1. Espacios de sueño separados: Es importante garantizar que los niños tengan un espacio individual y seguro para dormir. Al asegurar que duerman en un lugar separado, reducimos significativamente el riesgo de abuso.

2. Supervisión de dispositivos electrónicos: Debemos establecer límites claros en el uso de dispositivos electrónicos y supervisar la actividad en línea de nuestros hijos para prevenir situaciones de riesgo.

3. Atención a las diferencias de edad: Es fundamental estar atentos a posibles situaciones de riesgo cuando hay una gran diferencia de edad entre los niños y promover la educación sexual y el consentimiento.

4. Espacios de juego seguros: Los lugares donde los niños juegan deben estar a la vista de los adultos para poder supervisar las interacciones y transmitir un mensaje de seguridad.

5. Consciencia sobre el consumo de alcohol: Es importante designar adultos sobrios para supervisar a los niños durante las fiestas, ya que el consumo de alcohol puede aumentar el riesgo de conductas inapropiadas.

Además, Palacios destaca la importancia de fomentar una conversación abierta y constructiva sobre la prevención del abuso sexual infantil con todos los miembros de la familia.

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