El próximo presidente del PAN será elegido el domingo 10 de noviembre, con Jorge Romero y Adriana Dávila como los contendientes finales en la carrera por la dirigencia del partido.
En un proceso que ha sido marcado por acusaciones y confrontaciones entre los dos candidatos, la elección se perfila como una prueba crucial para el futuro del partido.
La campaña interna ha sido intensa, con Dávila acusando a Romero de ser «igual» que el actual presidente del PAN, Marko Cortés.
Por su parte, Romero ha defendido su postura y ha cuestionado las acusaciones de su contrincante. La elección no solo determinará al presidente del PAN, sino también a los integrantes del Comité Ejecutivo Nacional (CEN).
Ambas planillas han presentado a sus candidatos, incluyendo figuras políticas destacadas que buscan llevar al partido por un nuevo rumbo.
En este proceso electoral, se destaca la importancia de la participación de los militantes del PAN, quienes tendrán la responsabilidad de elegir el rumbo del partido en los próximos años.
Con la distribución del material electoral programada para comenzar el lunes 4 de noviembre, se espera que la jornada electoral del domingo 10 de noviembre sea un hito en la historia del partido.
Según los estatutos del PAN, la planilla ganadora deberá obtener la mayoría absoluta de los votos emitidos o el 37%, con una diferencia de al menos 5 puntos porcentuales sobre el segundo lugar.
Si no se alcanzan los resultados se hará una segunda vuelta
En caso de no alcanzar estos resultados, se llevará a cabo una segunda vuelta para determinar al ganador.
Con una jornada electoral programada para el domingo 10 de noviembre, el PAN y sus militantes se preparan para un día crucial en la historia del partido.
La elección del nuevo presidente y del CEN marcará un nuevo capítulo en la historia del partido, con Jorge Romero y Adriana Dávila como los principales protagonistas de esta contienda.