La Cámara de Senadores aprobó una reforma constitucional que busca prevenir el nepotismo electoral y limitar la reelección en ciertos cargos políticos. Esta medida, respaldada por la presidenta Claudia Sheinbaum, fue avalada en una sesión ordinaria con el apoyo unánime de 127 senadores.

Posteriormente, 97 legisladores dieron su aprobación a los artículos reservados y modificaciones, por lo que superaron los 26 posicionamientos en contra.

La reforma prohibirá la reelección en cargos donde actualmente es posible, afectando a senadores y diputados, tanto locales como federales. Además, se establecerán restricciones para evitar que familiares directos de los titulares en funciones puedan contender inmediatamente en las siguientes elecciones.

De igual manera, aquellas personas con parentesco de consanguinidad o civil en línea recta sin limitación de grado y en línea colateral hasta el cuarto grado, o de afinidad hasta el segundo grado con la o el titular en el cargo tampoco podrán participar como candidatos.

En caso de que las personas que se encuentren en dicha posición busquen contender por un cargo de elección popular, deberán aguardar, al menos, un periodo antes de postularse sin violar la nueva determinación establecida en el proyecto.

La decisión de implementar la reforma a partir de 2030, en lugar de 2027, generó controversia. Algunos legisladores de oposición señalaron que esta modificación favorece a ciertos políticos que podrían buscar gubernaturas en 2027.

Sin embargo, los promotores de la reforma argumentan que esta temporalidad es necesaria para una transición adecuada. El dictamen ahora pasará a la Cámara de Diputados para su revisión y votación final.

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