Emilio Lozoya, ex director de Pemex, ha presentado una impugnación contra la negativa de libertad que le fue dictada la semana pasada por un juez federal en el caso Odebrecht. La medida cautelar que lo mantiene en prisión ha sido objeto de debate, y ahora se espera que un Tribunal Colegiado de Apelación analice el caso y determine si el ex funcionario debe continuar o no en la cárcel.

Según fuentes cercanas al caso, Lozoya presentó el recurso de apelación el miércoles pasado ante el Centro de Justicia Penal Federal del Reclusorio Norte. El ex director de Pemex enfrenta cargos por delitos de asociación delictuosa, cohecho y lavado de dinero relacionados con el caso Odebrecht.

Lozoya argumentó que había cumplido dos años en prisión sin que se le hubiera dictado sentencia, basándose en una jurisprudencia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación. Sin embargo, después de una audiencia de casi 12 horas, el juez sustituto de enjuiciamiento, José Rivas González, determinó que no era procedente otorgarle la libertad provisional.

El juez Rivas argumentó que el plazo de dos años no es aplicable cuando el acusado ejerce actos de defensa, como lo hizo Lozoya al buscar infructuosamente un criterio de oportunidad para convertirse en testigo colaborador. Según el artículo 165 del Código Nacional de Procedimientos Penales, la prolongación de la prisión preventiva debido al ejercicio del derecho de defensa del imputado es una excepción a la regla de dos años.

Ahora será un Tribunal Colegiado de Apelación el encargado de analizar el caso y determinar si Lozoya debe continuar en prisión o si se le otorgará la libertad a la espera de la sentencia. Esta nueva instancia revisará la impugnación presentada por el ex director de Pemex y se espera que emita su fallo en los próximos días.