En México, la obesidad es un problema de salud pública que afecta a casi cuatro de cada diez personas, según los resultados de la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (Ensanut) 2020-2023.

El estudio reveló que el 37.1% de la población adulta mexicana padece obesidad, con un porcentaje más alto en mujeres que alcanza el 41.0%. Estos alarmantes datos muestran que la obesidad sigue siendo un desafío importante en el país, ya que se asocia con un mayor riesgo de desarrollar enfermedades crónicas como la diabetes tipo 2, la hipertensión arterial y la dislipidemia.

En este sentido, el estudio de la Ensanut analizó la información de más de 32 mil participantes mayores de 20 años durante el período 2020 a 2023, con el objetivo de caracterizar la población adulta en función de su índice de masa corporal (IMC) y su relación con diversas enfermedades y factores de riesgo.

Uno de los hallazgos más preocupantes fue que el grupo de 40 a 59 años presentó la mayor prevalencia de obesidad, lo que sugiere que la población adulta en México está experimentando un aumento significativo en los casos de obesidad.

De hecho, en los últimos 23 años, se observó un incremento del 78% en la obesidad entre los hombres adultos de 20 años en adelante. Además, el estudio de la Ensanut reveló que el consumo de bebidas calóricas también juega un papel importante en la prevalencia de la obesidad en México.

Por lo tanto, es fundamental abordar este problema desde una perspectiva integral que incluya medidas para promover la actividad física, la alimentación saludable y la concienciación sobre los riesgos asociados con el exceso de peso.

Los datos de la Ensanut confirman que la obesidad sigue siendo una preocupación de salud pública en México, con un impacto significativo en la población adulta. Es necesario tomar medidas urgentes para abordar este problema y prevenir sus consecuencias a largo plazo en la salud de los mexicanos.

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