Fallece Donato Abarca, padre de uno de los 43 de Ayotzinapa
29/05/2025 - Hace 1 día en MéxicoFallece Donato Abarca, padre de uno de los 43 de Ayotzinapa

Con profunda tristeza, la comunidad de derechos humanos y las familias de los 43 estudiantes desaparecidos de Ayotzinapa lamentan el sensible fallecimiento de Donato Abarca, padre de Luis Ángel Abarca Carrillo, uno de los jóvenes cuyo paradero sigue siendo un enigma desde la fatídica noche del 26 de septiembre de 2014 en Iguala, Guerrero.
El Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez (Prodh), organización que ha acompañado de cerca la lucha de los padres, confirmó la noticia a través de sus redes sociales, expresando su solidaridad con la familia Abarca Carrillo en este momento de inmenso dolor. "Don Donato falleció sin conocer el paradero de su hijo. Nuestra solidaridad para toda su familia", manifestaron.
Donato Abarca, un hombre de origen campesino proveniente de San Antonio, Cuautepec, en la Costa Chica de Guerrero, se convirtió junto a su esposa, Metodia Carrillo Lino, en un símbolo incansable de la búsqueda de verdad y justicia.
Durante casi una década, ambos lideraron la exigencia de presentación con vida de sus hijos, enfrentando la angustia de la incertidumbre y la aparente lentitud de las investigaciones.
Desde el momento de la desaparición, Donato participó activamente en innumerables movilizaciones, protestas y mesas de diálogo con las autoridades mexicanas. Su voz se alzó con firmeza en marchas y foros, denunciando la impunidad que ha rodeado el caso Ayotzinapa y demandando avances reales que pudieran arrojar luz sobre el destino de su hijo y de los otros 42 estudiantes. A pesar del evidente desgaste físico y emocional que esta lucha implicaba, su compromiso nunca vaciló.
La partida de Donato Abarca representa una pérdida irreparable no solo para su familia, sino para todo el movimiento de padres de Ayotzinapa, quienes han mantenido viva la esperanza y la determinación de encontrar a sus hijos.
Doña Metodia Carrillo ha reiterado en diversas ocasiones que, a pesar del paso del tiempo, el profundo dolor por la ausencia de su hijo persiste, pero también su inquebrantable voluntad de continuar la búsqueda y de no cejar en la exigencia de justicia.
La lucha de los padres de Ayotzinapa se ve ahora marcada por la ausencia física de uno de sus pilares, un recordatorio sombrío de que el tiempo avanza sin que la verdad salga a la luz.