El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha realizado una nueva estimación respecto al crecimiento económico de México para el 2024. Según el organismo, se espera un aumento del 2.7% en la economía mexicana durante ese período. Sin embargo, a medida que avance el tiempo, se prevé una desaceleración en el crecimiento, proyectándose solo un 1.9% para el año 2025, después de haber registrado un incremento estimado de 3.4% en 2023.
Estos pronósticos llegan después de un periodo de turbulencia económica a nivel global. Según el FMI, la economía mundial se encamina hacia lo que ellos denominan como un «aterrizaje suave», con un crecimiento global del 3.1% para el año 2024. Por otro lado, se ha pronosticado una recesión en Argentina, lo cual representa un desafío para la tercera economía más grande de América Latina.
El FMI ha aumentado su previsión de crecimiento mundial para 2024, pasando del 2.9% previsto en octubre a un 3.1%. Esta expansión se debe a la resistencia económica sorprendentemente mayor de lo esperado en Estados Unidos, así como en otras grandes economías de mercado emergentes y en desarrollo, incluyendo a China. De hecho, se espera un crecimiento del 2.1% en la economía estadounidense, lo cual representa una mejora de 0.6 puntos porcentuales con respecto a las previsiones anteriores.
Estos pronósticos favorables en Estados Unidos son especialmente relevantes, ya que el presidente Joe Biden se enfrenta a las elecciones de noviembre y ha centrado gran parte de su campaña en temas económicos. El hecho de que la mayor economía mundial haya dejado atrás los temores de recesión y haya alcanzado un crecimiento del 2.5% al finalizar el año 2023, es una excelente noticia para la administración Biden.
El FMI también ha destacado mejoras en otras economías importantes, como China, que ha registrado un crecimiento del 4.6% en lugar del 4.2% estimado anteriormente, India con un 6.5%, Brasil con un aumento de 0.2 puntos porcentuales alcanzando un 1.7%, y Rusia con un crecimiento del 2.6%.
Sin embargo, a pesar de los pronósticos favorables, el entusiasmo en México es moderado, ya que el crecimiento estimado para los próximos años es considerablemente inferior a la tendencia observada entre 2000 y 2019, cuando la media era de un 3.8% anual.
Por otro lado, la zona euro solo crecerá un 0.9%, debido a la baja expansión de Alemania, que solo alcanzará un 0.5%. Aunque España parece resistirse a esta tendencia, con una proyección de aumento del 1.5%.
En tanto a Argentina, tras una recuperación récord después de la pandemia, con crecimientos del 10.3% en 2021 y del 5.4% en 2022, se espera que continúe su tendencia recesiva del año anterior. Esto se debe en parte al enfoque reformista del presidente Javier Milei, que ha devaluado el peso en un 50% en menos de dos meses, una medida recomendada por el FMI, organismo con el cual el país tiene una deuda de 44 mil millones de dólares.
El gobierno argentino también ha emitido un megadecreto para liberalizar los precios de la economía, comenzando por los combustibles. Sin embargo, se espera un periodo de «estanflación», es decir, una combinación de estancamiento con alta inflación, como resultado de estas reformas.