En una medida sin precedentes, el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador ha entregado el control del Aeropuerto Internacional Quetzalcóatl de Nuevo Laredo a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
La Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) anunció esta asignación a través del Diario Oficial de la Federación (DOF) el pasado viernes. La designación del aeropuerto a la Sedena fue tomada en consideración al Programa Sectorial de Comunicaciones y Transportes 2020-2024, cuyo objetivo es fortalecer el transporte en el país a largo plazo, con enfoque regional y sustentable.
La Sedena ya tiene 10 aeropuertos a su cargo
Con este otorgamiento, la Sedena cuenta ahora con las capacidades necesarias para ejercer los derechos y obligaciones de asignación del Aeropuerto Internacional Quetzalcóatl. Además de Nuevo Laredo, la Sedena también ha recibido el control de otros aeropuertos en los últimos días.
Ayer mismo, el gobierno entregó a la Sedena el control del Aeropuerto Internacional de Campeche «Ingeniero Alberto Acuña Ongay», el Aeropuerto Internacional de Nogales en Sonora y el Aeropuerto Internacional de Ciudad Victoria «General Pedro José Méndez» en Tamaulipas.
En tan solo cuatro días, el gobierno mexicano ha entregado un total de 10 aeropuertos a la Sedena con el objetivo de que los administren, operen y exploten. Además de estos aeropuertos, actualmente la Sedena también tiene el control del Aeropuerto Internacional de Felipe Ángeles (AIFA), la nueva aerolínea Mexicana de Aviación, así como el Tren Maya.
Este cambio en la administración de los aeropuertos ha generado tanto elogios como críticas, ya que algunos consideran que la Sedena no cuenta con la experiencia ni los recursos necesarios para gestionar eficientemente estas instalaciones. Sin embargo, el gobierno defiende que esta medida busca fortalecer la seguridad y la soberanía del país.