Margarita Ríos Farjat, ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), manifestó que la igualdad de género en la impartición de justicia es uno de los retos que enfrentan los sistemas de justicia.

Durante la inauguración de la Conferencia Regional de América Latina y el Caribe, de la Asociación Internacional de Mujeres Juezas, la ministra señaló que se debe evitar que los avances tecnológicos que se emplean en la función jurisdiccional, como el uso de la inteligencia artificial, representen instrumentos a través de los cuales se perpetúen y normalicen estereotipos de género.

Agregó que la justicia digital debe ser una justicia con perspectiva de género que sirva para identificar y depurar los ordenamientos jurídicos de aquellas malas costumbres de la concepción patriarcal.

Así como lograr una igualdad sustantiva entre los géneros, no sólo para garantizar que las mujeres tengan igual acceso a las herramientas tecnológicas, sino también para asegurar que estas tecnologías no perpetúen o agraven las desigualdades existentes.

Ríos Farjat confesó que el uso creciente de algoritmos

Ríos Farjat enfatizó que el uso creciente de algoritmos y herramientas de inteligencia artificial en la toma de decisiones judiciales y en otros sistemas que afectan la vida de las personas están diseñados sin tomar en cuenta que existen los sesgos de género, lo que puede llevar a decisiones discriminatorias.

Calificó como fundamental que las decisiones asistidas o adoptadas por herramientas tecnológicas se sometan al mismo escrutinio de igualdad de género que las decisiones humanas.

En su intervención la directora de la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Sonia Venegas Álvarez, comentó que estamos entrando a una etapa de justicia digital, donde se plantea la posibilidad de que los juzgadores sean sustituidos por programas digitales.

“Esto impone el cuestionamiento de hasta dónde puede llegar la intervención de la inteligencia artificial en el ámbito de la justicia”, expresó.

Venegas Álvarez enfatizó que se requiere educación digital desde la infancia que permita a las personas cuestionar todos los productos de inteligencia artificial y poder determinar cuáles son reales y el propósito que persiguen.