Iglesia propone mediar conflicto entre cárteles del narcotráfico en todo el país
30/10/2024 - Hace 2 semanas en MéxicoIglesia propone mediar conflicto entre cárteles del narcotráfico en todo el país
La Iglesia en México ha sorprendido al país al ofrecerse como mediadora en el conflicto entre los cárteles del narcotráfico que ha desatado una ola de violencia en diversas regiones.
Esta propuesta ha surgido a raíz de la ejecución del sacerdote tzotzil Marcelo Pérez Pérez, y se presenta como una alternativa para lograr la paz en zonas donde la presencia del crimen organizado ha causado estragos.
El monseñor Ramón Castro, secretario general de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), ha manifestado la disposición de la Iglesia y sus sacerdotes para mediar en los conflictos entre las organizaciones criminales en todo el país. Este ofrecimiento se fundamenta en la experiencia previa de la Iglesia en Guerrero, donde se logró un pacto de tregua entre la Familia Michoacana y los Tlacos.
En declaraciones a medios de comunicación, el monseñor Castro ha señalado que la Iglesia está dispuesta a colaborar con el gobierno federal para solucionar los conflictos entre los cárteles en comunidades donde tienen presencia. Esta iniciativa se basa en la premisa de abordar las causas profundas de los conflictos para evitar enfrentamientos directos, como los ocurridos en administraciones anteriores.
Estrategia de «abrazos no balazos»
El obispo también ha expresado su opinión sobre la estrategia de seguridad implementada por el expresidente Andrés Manuel López Obrador, conocida como «abrazos no balazos», de la cual reconoció puntos positivos en dicha estrategia.
Esta propuesta de mediación de la Iglesia llega luego de la firma de un acuerdo de cese al fuego entre la Familia Michoacana y Los Tlacos en Guerrero a principios de este año, tras la violencia desatada en la comunidad de Buenavista de los Hurtado.
El compromiso de las organizaciones criminales de detener los enfrentamientos en diversas regiones del estado ha sido visto como un primer paso hacia la construcción de la paz en zonas afectadas por el narcotráfico. En este contexto, la Iglesia se posiciona como un actor clave en la búsqueda de soluciones pacíficas para los conflictos entre los cárteles del narcotráfico en todo el país.
