En una reciente declaración, el embajador de Estados Unidos, Ken Salazar, elogió al presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, destacando su entrega y compromiso con el país. Durante la Tercera Convención Binacional México-EU, Salazar afirmó que AMLO ha dado la vida por México y lo calificó como un campeón del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).

Tras ser cuestionado sobre su relación con el mandatario mexicano, Salazar enfatizó su aprecio por López Obrador, resaltando su impacto histórico en México y su papel fundamental en la promoción de la integración regional a través del T-MEC.

El embajador estadounidense elogió la fortaleza de la relación económica entre ambos países y expresó su agradecimiento por las atenciones recibidas, entre las que destacó el conocimiento de la situación en el sureste mexicano.

Sin embargo, las declaraciones de Salazar contrastan con la postura de López Obrador respecto a las críticas del embajador hacia la reforma judicial en México. El mandatario mexicano ha defendido la soberanía del país y ha señalado que las relaciones con Estados Unidos y Canadá se mantienen, pero que ha decidido pausar la comunicación con Salazar y su embajada.

En días recientes, López Obrador ha reiterado su rechazo a la injerencia extranjera en asuntos internos de México, especialmente en lo que respecta a la reforma judicial. El Presidente ha calificado como imprudentes las declaraciones de Salazar y ha dejado claro que no aceptará injerencias que pongan en riesgo la democracia y las inversiones en el país.

Esta situación ha generado tensiones entre ambos países, especialmente en medio de las negociaciones comerciales y de cooperación establecidas a través del T-MEC. A pesar de ello, Salazar ha reafirmado su compromiso con la integración de América del Norte y ha expresado su preocupación por el posible impacto negativo de las diferencias en la relación bilateral.

En este contexto, la relación entre López Obrador y Salazar se mantiene en un punto de tensión, con posturas encontradas sobre temas clave como la reforma judicial y la soberanía nacional. Mientras el presidente mexicano defiende la autonomía de México, el embajador estadounidense busca promover la cooperación y el entendimiento entre ambas naciones.

A pesar de las divergencias, ambos líderes han demostrado su compromiso con sus respectivos países y con la promoción de la integración regional a través del T-MEC.

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