La dermatitis atópica es mucho más que una simple comezón en la piel; de acuerdo con la dermatóloga Helena Vidaurri de la Cruz, del Hospital General de México, se trata de un padecimiento inflamatorio sistémico que puede tener otros riesgos para la salud si no se trata de manera adecuada. Según el especialista, esta afección suele comenzar en la infancia, tanto por razones genéticas como ambientales.

En el marco del Día Nacional de la Dermatitis Atópica, que se celebra el 27 de noviembre, Vidaurri de la Cruz explicó que esta enfermedad es la primera causa de consulta dermatológica en nuestro país. Afecta aproximadamente al 10% de la población general y puede llegar a presentarse en hasta el 30% de los niños y niñas. Los síntomas suelen manifestarse desde los primeros meses de vida, con la piel seca, irritada y con picazón.

El especialista señaló que existe una predisposición genética que puede causar varios defectos en la producción de proteínas y grasas en la piel, lo que la hace ineficiente para protegerse de agentes externos como el polvo, bacterias, virus o sustancias alergénicas. La dermatitis atópica moderada o grave se caracteriza por lesiones que ocupan más del 10% de la superficie corporal, lo que puede afectar la calidad de vida de las personas que la padecen.

En este sentido, es importante tener en cuenta que hay que cuidar la piel de manera integral y especializada. Por ejemplo, el lavado inadecuado con jabones agresivos o el uso de esponjas que irritan la piel pueden empeorar los síntomas de la dermatitis atópica. Por ello, es fundamental utilizar productos específicos y suaves que respeten la barrera cutánea y contribuyan a mantener la piel sana.

Los avances en el tratamiento y cuidado de la Dermatitis Atópica

Recientemente, los laboratorios Sanofi y Bioderma han anunciado una alianza estratégica para mejorar la atención de las personas que viven con dermatitis atópica de moderada a grave. Esta colaboración tiene como objetivo elevar el cuidado integral de los pacientes, cuya calidad de vida se ve afectada por síntomas como comezón, resequedad, agrietamiento, enrojecimiento, dolor y sangrado en la piel. Estos síntomas no solo afectan la condición física, sino también la salud mental, el entorno social y las finanzas personales de quienes los padecen.

La dermatitis atópica es una afección dermatológica común que requiere un enfoque integral para mejorar la calidad de vida de los pacientes. Es fundamental educar sobre el cuidado de la piel y usar productos adecuados para prevenir y tratar los síntomas. Con la atención adecuada y el apoyo de especialistas y laboratorios comprometidos, es posible controlar esta enfermedad y mejorar la salud y el bienestar de quienes la padecen.

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