El Instituto Politécnico Nacional (IPN) se encuentra en el centro de un escándalo de corrupción, con uno de sus altos funcionarios, Javier Tapia Santoyo, secretario de Administración, en el epicentro de una mega red de empresas fantasma.

La investigación, llevada a cabo por la asociación civil TOJIL bajo el título ‘El Clan Biomédica: negocios, corrupción y complicidades detrás de la mayor empresa fantasma del sector salud’, revela conexiones de Tapia y otros funcionarios del IPN con Interacción Biomédica SA de CV, una empresa que ha obtenido millonarios contratos irregulares con el sector salud y la misma institución educativa.

Mega red de corrupción involucra a varios funcionarios del IPN

TOJIL destapa una compleja red de 84 compañías que están interconectadas a través de socios, apoderados, administradores, domicilios fiscales, objetos sociales y transacciones financieras. Entre estas empresas, destaca la presencia de Interacción Biomédica, considerada la ‘empresa fantasma’ líder del sector salud, con contratos fraudulentos con el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) y las fuerzas armadas.

La investigación no solo señala la participación de Javier Tapia Santoyo en esta red, sino que también involucra a otros funcionarios del IPN, incluyendo al vocero de la institución, Marco Urbina, así como a familiares, esposa y colegas de trabajo del secretario de Administración. Este entramado de conexiones muestra la complejidad y alcance de la red de corrupción.

Desde 2018, la red ha recibido y triangulado más de tres mil 300 millones de pesos del erario público a través de contratos con el ISSSTE. Estos fondos se canalizaron durante el tiempo en que Tapia trabajaba en el Departamento de Mantenimiento y Contrataciones de un hospital del ISSSTE y, posteriormente, en la tesorería del IPN.

FGR ya investiga el entramado de corrupción entre el IPN y el ISSSTE

La Secretaría de la Función Pública y Raquel Buenrostro, actual secretaria de Economía, han presentado denuncias relacionadas con estos hechos. Desde 2022, la Fiscalía General de la República (FGR) inició una investigación y abrió una carpeta en contra de Javier Tapia y su círculo por posibles actos de enriquecimiento ilícito y corrupción.

Ante la gravedad de las acusaciones, Javier Tapia Santoyo, su esposa y su familia han intentado frenar las investigaciones mediante la presentación de nueve amparos. Además, han buscado detener procedimientos de responsabilidad administrativa y posibles órdenes de aprehensión.

Este escándalo de corrupción en el IPN pone en entredicho la integridad de la institución educativa. Las acciones ilegales y los intentos de obstaculizar las investigaciones demuestran la necesidad de una rendición de cuentas efectiva para erradicar la corrupción en las instituciones gubernamentales y fortalecer la confianza en el sistema.

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