Las fuertes lluvias registradas en los últimos días en el sur del país han sido una bendición para los monos saraguatos, quienes se encontraban en una crisis debido a las altas temperaturas. Gracias al descenso en los termómetros provocado por las precipitaciones, la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) informó que no se han registrado nuevas muertes de estos primates.

220 monos saraguatos han perdido la vida por el calor extremo

Hasta el momento, la cifra de monos saraguatos muertos por las olas de calor se mantiene en 220, de los cuales 158 corresponden a Tabasco, 35 a Chiapas, 24 a Veracruz y 3 a Campeche. En Tabasco, donde se concentra el mayor número de decesos, continúan los recorridos para monitorear la situación y brindar atención a los primates afectados.

En caso de localizar a un mono saraguato cuya salud se ha visto comprometida por las altas temperaturas, las autoridades ambientales lo trasladan a una Unidad de Manejo para la Conservación de la Vida Silvestre, donde recibe la atención necesaria. Aquellos primates que ya fueron atendidos continúan en procesos de readaptación y liberación, después de haber sido sometidos a rehabilitación en albergues establecidos en diferentes comunidades.

Lluvias torrenciales mejoran las condiciones del hábitat

Durante los últimos dos días, el sur de México ha sido azotado por lluvias torrenciales, particularmente en Chiapas, donde las precipitaciones han afectado a municipios como Juárez, Pichucalco, Palenque y Playas de Catazajá. Estas condiciones climáticas han contribuido a mejorar considerablemente el hábitat de los monos saraguatos, brindándoles un respiro frente a las extremas temperaturas que amenazaban su supervivencia.

La crisis que han enfrentado los monos saraguatos es un ejemplo más de cómo el cambio climático y sus efectos, como las olas de calor extremo, están poniendo en riesgo la biodiversidad y la vida silvestre en todo el mundo.

La respuesta ante esta crisis ha requerido de la colaboración y los esfuerzos conjuntos de diversas instituciones y especialistas, incluyendo a la Semarnat, veterinarios, primatólogos y autoridades locales. Esta acción coordinada ha sido fundamental para brindar atención a los monos saraguatos afectados, monitorear la situación y trabajar en su rehabilitación y reintegración a su hábitat natural, una vez que las condiciones climáticas se han tornado más favorables.

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