Chiapas.- El pequeño de 11 años vivía con una pareja homoparental integrada por dos mujeres y era golpeado casi a diario por sus ‘mamis’.
En el municipio de Chiapa de Corzo, en Chiapas, vivía Carlitos de 11 años con «sus mamis», quienes aparentemente lo asesinaron a golpes.
Una de las mujeres era catedrática y la otra enfermera.
Según la carpeta de investigación, el cuerpo del menos tenía más de 53 escoriaciones en el cuerpo.
Los vecinos conocían a Carlitos porque les ofrecía chicharrones todos los días, ahora son ellos quienes exigen justicia por el menor.
De acuerdo con declaraciones de los vecinos, escuchaban casi a diario los llantos del menor desde el interior de su casa.
Debido a que «sus mamis» contantemente lo golpeaban y también era castigado, obligándolo a escribir hasta 500 veces la frase ‘debo obedecer a mis mamis’ y ‘no debo mentir’.
Las madres de Carlitos no contaban con ningún documento de adopción otorgado por el Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF).
Sino que contaban con un documento, el cual estaba aparentemente firmado por la madre biológica del niño.