La noticia de la posible liberación de Mario Aburto Martínez, homicida confeso de Luis Donaldo Colosio Murrieta, provoca controversia en México. Se había previsto que Aburto abandonaría la cárcel el 23 de marzo de 2024, luego de cumplir su sentencia de 30 años por el magnicidio. Sin embargo, la situación ha dado un giro inesperado.
El Tribunal Colegiado del Estado de México le otorgó un amparo en octubre de 2023, invalidando su condena original de 45 años y ordenando una nueva sentencia conforme al Código Penal del Estado de Baja California. Esto abriría la posibilidad de que Aburto saliera en libertad luego de 30 años, pero la Fiscalía General de la República (FGR) impugnó esta decisión.
La Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) no ha fijado una fecha para resolver el recurso de revisión presentado por la FGR. A pesar de que el proyecto de la ministra Margarita Ríos Farjat planteaba ratificar el amparo concedido a Aburto, este no fue discutido en la sesión del 13 de marzo y no aparece en las agendas posteriores.
Esto ha generado incertidumbre sobre el futuro de Mario Aburto, ya que, de no resolverse su situación legal antes del 23 de marzo de 2024, podría permanecer en prisión incluso después de cumplir su condena. Por el momento, la posibilidad de su liberación parece más distante de lo esperado.
Esta situación ha avivado el debate sobre la justicia en México y la validez de las decisiones judiciales, especialmente en casos de gran relevancia como el asesinato de un candidato presidencial. La sociedad mexicana sigue con atención el caso de Mario Aburto, a la espera de una resolución definitiva por parte de la SCJN.
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