A tres años de la tragedia que sacudió a la Ciudad de México con el colapso de un tramo elevado de la Línea 12 del Metro, la cual cobró la vida de 26 personas, el compromiso de las autoridades capitalinas con las víctimas sigue siendo inquebrantable. El jefe de Gobierno de la Ciudad de México, Martí Batres Guadarrama, reafirmó que ninguna víctima quedó en el desamparo, asegurando que desde el inicio se estableció un compromiso firme con su atención integral.

Justicia y reconstrucción: Un proceso continuo

Desde Xochimilco, el mandatario capitalino destacó que los lesionados recibieron atención médica y psicológica gratuita en un esfuerzo coordinado entre 19 hospitales públicos y 7 privados. Más allá de la atención médica, se ha brindado apoyo en diversas áreas, desde la gestión de medicamentos hasta la tramitación de becas, empleos e incluso viviendas para aquellos que lo necesitaron. Este compromiso se refleja en la designación de un funcionario público para cada víctima, actuando como enlace con las autoridades y garantizando un seguimiento personalizado de su situación.

Asimismo, se han gestionado indemnizaciones con la compañía aseguradora del Metro y se han suscrito 118 acuerdos reparatorios, demostrando el compromiso del Gobierno de la Ciudad de México con la reparación del daño causado. Además, el 92% de las víctimas y sus familiares han optado por el proceso de justicia restaurativa, buscando sanar las heridas de manera integral.

Reconstrucción de la Línea 12: Seguridad para los usuarios

La reapertura de la Línea 12 el pasado 30 de enero, completamente reforzada y reconstruida, marca un logro en el proceso de recuperación. Esta línea, vital para cerca de 400 mil usuarios del sur-oriente de la Ciudad de México, ha sido objeto de una exhaustiva revisión y reconstrucción, con la participación y supervisión de instituciones públicas, privadas y académicas. Su reapertura no solo representa un avance en la infraestructura del transporte público, sino también un símbolo de la resiliencia de una ciudad que se une para superar las adversidades.

Finalmente, a tres años de la tragedia en la Línea 12 del Metro, el compromiso del Gobierno de la Ciudad de México con las víctimas y la reconstrucción de la infraestructura es inquebrantable. Aunque el dolor persiste, también lo hace la esperanza y el compromiso de seguir adelante, reconstruyendo no solo una línea de metro, sino también la confianza en las instituciones y en la seguridad de los ciudadanos.

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