En víspera de Navidad, México se vio sumido en una ola de violencia que dejó un total de 65 personas muertas, en una tragedia que ensombrece las celebraciones y pone en evidencia la grave situación de seguridad que atraviesa el país. Según cifras preliminares del conteo diario de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), estos asesinatos se registraron el pasado 24 de diciembre.
El Estado de México fue una de las regiones más afectadas por este aumento de la violencia, acumulando un total de ocho víctimas mortales, al igual que Michoacán, ambos acechados por grupos criminales. Chihuahua, Guerrero, Guanajuato y Nuevo León también se cuentan entre los estados más afectados, con un número significativo de fallecidos.
Cabe destacar que, durante el fin de semana previo a la Navidad, el país sufrió un total de 188 asesinatos, de los cuales 65 tuvieron lugar el 24 de diciembre. Estos datos son preocupantes, ya que demuestran un incremento en la violencia durante la época festiva, en la que se espera que la paz y el amor reinen.
El reporte diario presenta una subestimación con respecto a las cifras mensuales del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP). Es importante mencionar que el estado de Michoacán fue el más violento durante ese fin de semana, con 23 asesinatos, seguido por Guanajuato con 19 y el Estado de México con 16.
Las cifras acumuladas del 1 al 24 de diciembre son alarmantes, con un total de mil 637 personas asesinadas en el país. Esto equivale a un promedio de 68 homicidios diarios, una cifra que pone de manifiesto la necesidad de tomar medidas urgentes para garantizar la seguridad de los mexicanos.