El Presidente Andrés Manuel López Obrador ha decretado la nacionalización de la planta productora de hidrógeno U-3400, ubicada en Tula, Hidalgo.
La medida, publicada en el Diario Oficial de la Federación, establece la ocupación inmediata de la planta por parte de Pemex Transformación Industrial, subsidiaria de Petróleos Mexicanos.
La planta, vendida en 2017 a Air Liquide por 52 millones 700 mil dólares, deberá suministrar hidrógeno para la producción de gasolinas y diésel.
La justificación del presidente se basa en la creciente demanda de hidrógeno para reducir el uso del azufre en la elaboración de productos petrolíferos, con el objetivo de disminuir la contaminación.
Además, López Obrador resalta la importancia de la soberanía energética y la autonomía en el suministro de hidrógeno, actualmente dependiente de terceros.
Nacionalización de Planta de Hidrógeno en Tula
La planta U-3400 se convierte en un activo estratégico para México, ya que es la única fuente de suministro de hidrógeno para la Refinería Miguel Hidalgo, esencial para la producción de gasolinas y diésel. La medida busca evitar riesgos en la producción y garantizar la estabilidad económica del país.
Cabe destacar que la planta fue privatizada en 2017, vendida a Air Liquide México, comprometiéndose esta última a realizar trabajos de mantenimiento y renovación.
Sin embargo, ante la necesidad de fortalecer la soberanía energética, se ha ordenado la ocupación inmediata por Pemex, con la correspondiente indemnización que será establecida por el Instituto de Administración y Avalúos de Bienes Nacionales.
El presidente otorga un plazo de diez días hábiles para que los propietarios inicien un procedimiento judicial, exclusivamente para cuestionar el monto de la indemnización.
Esta medida refleja el compromiso del gobierno mexicano con la seguridad energética y la protección de activos estratégicos para el desarrollo del país.
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