El Comité contra la Desaparición Forzada (CDF) de la ONU expresó su preocupación por la seguridad de las personas que participan en las búsquedas de desaparecidos en Jalisco, tras el ataque armado que causó la muerte de seis elementos de la Fiscalía General del Estado y la policía municipal de Tlajomulco, el pasado 11 de julio.

El organismo internacional de la ONU  condenó la emboscada, que se produjo mientras los agentes atendían una denuncia sobre posible hallazgos de restos óseos, y pidió al Estado mexicano que inicie una investigación exhaustiva y diligente para identificar y sancionar a los responsables.

Asimismo, llamó al gobierno a establecer medidas de protección adecuadas para quienes realizan las labores de búsqueda e investigación de personas desaparecidas, entre ellos víctimas, familiares, acompañantes y servidores públicos, con el fin de garantizar la continuidad de estas acciones y el derecho a la verdad y la justicia.

El CDF recordó que tanto las búsquedas como las investigaciones son obligaciones permanentes del Estado, y que no deben suspenderse por motivos de seguridad. Esto, luego de que el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, anunciara que se detendrían las búsquedas originadas por denuncias anónimas.

El Comité también instó al Estado a brindar oportunidades de participación a las víctimas y sus familiares, y a asegurar que no se queden sin apoyo. Además, exhortó a fortalecer el sistema de protección a víctimas y a los servidores públicos dedicados a la búsqueda e investigación.

Según datos del Estado mexicano, hay más de 110 mil personas desaparecidas en el país, siendo Jalisco el estado con el mayor número. En 2022, el CDF realizó una visita al país y publicó un informe con recomendaciones al respecto.

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