Un grupo de personas que viven con VIH, activistas y organizaciones no gubernamentales, llevaron a cabo un acto de protesta en las instalaciones del Centro Nacional para la Prevención y el Control del VIH (Censida) en la Ciudad de México. Las razones detrás de esta acción están relacionadas con la violencia institucional, el desabasto de medicinas para tratar la enfermedad y la falta de diagnósticos.
Bajo la consigna de exigir una explicación y una solución para el problema del desabasto de medicinas, los manifestantes demandaron un diálogo con Alethse de la Torre, titular de Censida. «Queremos que nos expliquen y que les expliquen a todos por qué no hay respuesta al VIH en este país, por qué se ha vivido molestándonos, somos personas que vivimos con VIH y se la han pasado acosándonos este año», expresó el director de la ONG Vihve Libre.
La principal denuncia de los manifestantes es que, desde el año 2019, el gobierno mexicano ha dejado de destinar recursos del presupuesto a la atención de personas con VIH. Esta falta de inversión ha generado una escasez de medicamentos y un deterioro en la calidad de la atención en clínicas como el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), donde los pacientes sufren discriminación y criminalización.
Durante la manifestación, los activistas intervinieron los muros del edificio de Censida con mensajes como «Censida no juegues con nuestras VIHdas», dejando en claro su exigencia de una atención integral. Además, prendieron fuego a un sofá como forma simbólica de demandar la presencia de la titular de la institución.
La desesperación de los pacientes y la falta de respuestas por parte de las autoridades han llevado a acciones de protesta más radicales como esta.