Luego de que la Fiscalía General del Estado confirmara que la Panadería Chiapas fue víctima de una ‘extorsión virtual’ y no de una amenaza real, la propietaria aseguró que seguirán operando con medidas de protección otorgadas por las autoridades.

Los hechos

La historia comenzó cuando, en un video compartido en la cuenta oficial de TikTok de la panadería, su propietaria anunciaba que, debido a una amenaza de pagar una cuota de “derecho de piso”, se verían obligados a cerrar el establecimiento.

Este mensaje, que rápidamente se volvió viral, provocó una ola de apoyo de la comunidad y la preocupación de las autoridades, quienes se vieron obligadas a actuar de inmediato para esclarecer los hechos.

En respuesta a las alarmas, la Fiscalía General del Estado de Quintana Roo emitió un comunicado donde se confirmaba que la llamada extorsiva que recibió la panadería provenía de un reclusorio de la Ciudad de México. La Policía Cibernética pudo rastrear el origen del mensaje, disipando los temores de que un grupo delictivo estuviera operando activamente en Cancún.

La Fiscalía se puso en contacto con la propietaria, quien expresó su gratitud por la rápida respuesta de las autoridades. En un nuevo video, la propietaria mostró las imágenes de la llegada de efectivos policiales a su domicilio y las medidas de protección implementadas, entre las que se incluía la instalación de una cámara de seguridad en el inmueble.

“Tenía tanta tristeza que mis recetas quedaran en el olvido. Gracias a ustedes, la Fiscalía se puso en contacto con nosotros. Todo esto ha sido tan rápido que seguimos en shock con esta situación. Aunque ya tenemos medidas de protección, quiero invitarles a que nos sigamos cuidando como la familia que somos, hoy más fuerte que nunca», expresó la propietaria, visiblemente emocionada. Además, aprovechó la ocasión para compartir un mensaje personal: “Espero ver a mis nietecitos este fin de semana, atentamente tu abuelita Mari”.

#SeguridadYJusticia | Confirma Panadería Chiapas que Seguirá Operandohttps://t.co/jPPtr4wl4b pic.twitter.com/gQ3SIzs6V9

— Diario CAMBIO 22 (@DiarioCAMBIO22) April 2, 2025

Este caso, que aunque tuvo un final feliz para la Panadería Chiapas, resalta una problemática mucho más grande que afecta a numerosos comerciantes de Cancún, quienes han sido víctimas de amenazas reales de grupos delictivos.

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Las extorsiones, tanto virtuales como físicas, siguen siendo una amenaza constante para los empresarios locales, muchos de los cuales no tienen la suerte de contar con el apoyo de las autoridades ni la misma visibilidad mediática que ha recibido este caso.

La intervención de la Fiscalía, aunque efectiva en este incidente, subraya la necesidad urgente de medidas más amplias para proteger a los comerciantes de la región y garantizar que aquellos que recurren a la extorsión no queden impunes.

Mientras tanto, la Panadería Chiapas se mantiene firme, con la esperanza de que su negocio y su legado familiar continúen creciendo, tal y como lo soñó su fundadora.