Sheinbaum confirma que algunos trabajadores del INAI seguirán en Secretaría Anticorrupción
20/03/2025 - Hace 14 horas en MéxicoSheinbaum confirma que algunos trabajadores del INAI seguirán en Secretaría Anticorrupción

La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo confirmó que algunos trabajadores del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI) serán liquidados, mientras que otros se integrarán a la nueva Secretaría Anticorrupción y Buen Gobierno.
Durante la conferencia matutina en Palacio Nacional, Sheinbaum Pardo explicó que el presupuesto del INAI sufrirá un recorte significativo. Sin embargo, garantizó que se respetarán los derechos laborales conforme a lo establecido en la ley.
«Se va a cumplir con la ley, no puede haber más allá de lo que dice la ley», afirmó la presidenta. También adelantó que la nueva Ley de Transparencia podría aprobarse en las próximas horas, lo que permitirá dar certeza sobre el proceso.
La Secretaría Anticorrupción sostendrá mañana una reunión con trabajadores del INAI para discutir su situación. Algunos empleados serán liquidados conforme a la normatividad vigente, mientras que otros permanecerán en la nueva dependencia.
Protestas de trabajadores del INAI
Desde el anuncio de la desaparición del INAI, trabajadores del organismo han realizado protestas para exigir su liquidación conforme a la ley. Esta semana, bloquearon vialidades en el sur de la Ciudad de México y cerraron simbólicamente las instalaciones del instituto.
El Congreso aprobó en diciembre pasado una reforma constitucional que transfiere todas las funciones del INAI a la Secretaría Anticorrupción. La extinción del organismo se concretará en cuanto el Congreso apruebe la nueva Ley General de Transparencia y Acceso a la Información Pública, lo que podría ocurrir en las próximas horas.
El gobierno federal asegura que la nueva estructura permitirá garantizar el acceso a la información y la protección de datos con mayor eficiencia.
Cabe mencionar que este miércoles, los cuatro comisionados tomaron la decisión de manera unilateral de llevar a cabo la última sesión del instituto a puerta cerrada, sin permitir el acceso público ni el registro de su realización.
Se atrincheraron en sus oficinas, colocando sillones bloqueando las entradas y palos de madera en las puertas de cristal, con el fin de evitar que los empleados descontentos pudieran interrumpir la sesión virtual.