En la madrugada del 2 de enero, a las 0:26 hora local (6:26 UTC), un sismo de magnitud 4.3 sacudió la región de Salina Cruz, Oaxaca.
Según datos preliminares del Servicio Sismológico Nacional, el epicentro se localizó a 65 km al sureste de la ciudad, con una profundidad de 25.2 kilómetros.
Simultáneamente, en Chiapas, se reportó otro sismo de magnitud 4.4. En respuesta a estos eventos, el Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred) emitió recomendaciones, destacando la importancia de obtener información de fuentes oficiales y no caer en rumores.
Ante la posibilidad de réplicas, el Cenapred insta a la población a realizar revisiones en sus hogares en busca de posibles daños, usar el teléfono móvil solo en situaciones de emergencia, y tomar precauciones, como evitar encender fuentes de fuego hasta asegurarse de la ausencia de fugas de gas.
En caso de un terremoto, es crucial mantenerse alerta y seguir las indicaciones de las autoridades locales, estatales y federales de Protección Civil para garantizar la seguridad y el bienestar de la comunidad.