La comunidad de Torreón está de luto tras la partida de Claudio Mendoza Rodríguez, un hombre que pesaba más de 300 kilos y cuya historia de lucha contra la obesidad conmovió a los laguneros. El pasado viernes 17 de mayo, Claudio falleció después de haber sufrido un paro cardíaco semanas atrás.

Un llamado de auxilio que resonó en la región

En abril, Claudio hizo un desesperado llamado a la comunidad en La Laguna, buscando apoyo para cambiar su estilo de vida y hacer frente a los problemas de salud que su condición le había traído. Sus palabras encontraron eco no solo en los laguneros, sino también en especialistas médicos de Monterrey, quienes se ofrecieron a brindarle tratamiento.

Conmovido por la solidaridad de la gente, Claudio expresó su esperanza de poder recuperar su movilidad y disfrutar de momentos junto a su familia. ‘Quiero levantarme de esta cama, echarle ganas y salir adelante. Primero lo que quiero yo es poder jugar con mi hijo, porque mi niño está chiquito, tiene 5 años y pues ocupa mucho pues de nuestra dinámica familiar, y yo quiero darle tiempo de calidad a mi hijo, trabajar y echarle ganas’, declaró en ese entonces.

Sueños postergados por un accidente

Claudio había llegado a pesar más de 300 kilos debido a un accidente que lo dejó inmóvil hace casi 20 años. Tras perder la movilidad en su pierna y no poder continuar como taxista, aprendió el oficio de reparación de celulares y, junto con su esposa Josefina, establecieron un taller en su domicilio.

Josefina Ramírez, la esposa de Claudio, era el pilar de la familia. Además de brindarle los cuidados necesarios a su esposo, también se encargaba de criar a un sobrino de 5 años que les fue entregado por su madre desde que era un bebé. Ahora, tras la partida de Claudio, Josefina deberá seguir adelante por su cuenta y mantener a su pequeña familia.

El pasado sábado 18 de mayo, la familia de Claudio le dio sepultura, poniendo fin a una historia que conmovió a la comunidad lagunera. A pesar de los sueños postergados y los desafíos que enfrentó, Claudio Mendoza Rodríguez dejó un legado de perseverancia y determinación para mejorar su calidad de vida y la de su familia. Su partida es una pérdida para Torreón, pero su historia seguirá inspirando a quienes luchan contra la adversidad.

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