En un nuevo episodio de violencia política en Veracruz, Crispín Hernández Sánchez, candidato del Partido del Trabajo (PT) a la presidencia municipal de Mixtla de Altamirano, fue víctima de un brutal atentado en la comunidad Xochitla. Su camioneta fue incendiada y baleada con más de 20 impactos de bala, en lo que claramente fue un acto de intimidación con tintes políticos.

Renuncia tras amenazas directas

Horas después del atentado, Hernández Sánchez ofreció una rueda de prensa en la que anunció su renuncia a la contienda electoral. Visiblemente afectado, el político denunció que ha recibido constantes amenazas y señaló directamente a Celia García Rodríguez, candidata del PRI, de rodearse de individuos con antecedentes de violencia.

El ahora exaspirante afirmó que, un día antes del ataque, recibió un mensaje de García Rodríguez en el que le pedía que "la dejara pasar" y le aseguraba que no revisaría los libros contables de su hermana, Norma Hernández, actual alcaldesa de Mixtla de Altamirano. Este mensaje, según Hernández Sánchez, fue un claro intento de intimidación previo al atentado.

Un ataque con sello criminal

Las imágenes de la camioneta Toyota pick-up calcinada y con múltiples perforaciones por arma de fuego conmocionaron a la comunidad y a los actores políticos de la región. Aún más alarmante fue el hallazgo de un mensaje amenazante en el vehículo, presuntamente firmado por una organización criminal.

Desde el Congreso de Veracruz, la dirigencia del Partido del Trabajo condenó enérgicamente la agresión. Benjamín Robles Moya y el diputado Ramón Díaz Ávila hicieron un llamado urgente a la gobernadora Rocío Nahle para que tome cartas en el asunto o, en su defecto, solicite refuerzos para garantizar la seguridad de los candidatos en el estado.

Denuncia ante la Fiscalía y sospechas de un autoatentado

El diputado Ramón Díaz Ávila confirmó que Crispín Hernández ya presentó una denuncia formal ante la Fiscalía General de Veracruz. Asimismo, exhortó a todos los aspirantes que enfrenten situaciones similares a solicitar protección inmediata.

Sin embargo, el caso no ha estado exento de polémica. Un medio de comunicación de la región de Zongolica publicó una versión alternativa que sugiere que el ataque podría tratarse de un autoatentado, un señalamiento que el PT rechaza categóricamente.