En una impactante mañana en el municipio de Nextlalpan, Estado de México, un grupo de presuntos huachicoleros desató el caos al intentar ordeñar un ducto de Pemex, provocando un incendio que puso en peligro a la población y a los cultivos cercanos.

El siniestro tuvo lugar alrededor de las siete de la mañana, en una zona de cultivos adyacente a la caseta de cobro de Tultepec, que forma parte del Circuito Exterior Mexiquense (CEM). Según los informes, varios individuos intentaron abrir una toma clandestina en el ducto Venta de Carpio-Santa Ana, con el propósito de robar combustible ilegalmente. Sin embargo, la situación se salió de control de manera catastrófica y se desató un incendio fuera de control.

El fuego rápidamente se propagó y consumió extensas áreas de pastizales, generando una enorme columna de humo que alertó a los residentes de la zona. Ante el peligro inminente, se solicitó la presencia de las autoridades de seguridad, quienes se movilizaron rápidamente para controlar la situación.

El Ejército Mexicano, la Guardia Nacional, el personal de seguridad de Pemex, Protección Civil y los bomberos se presentaron en el lugar de los hechos para combatir las llamas y proteger tanto a los habitantes como a las áreas de cultivo. El incendio provocó el cierre temporal del servicio en el ducto, seguido de una quema controlada del combustible que se encontraba en su interior.

Afortunadamente, no se reportaron personas detenidas ni heridas como resultado de este incidente. Sin embargo, la zona tuvo que ser acordonada durante más de cuatro horas hasta que se concluyeron las labores de control y limpieza.