En un caso que causó conmoción en Argentina, las autoridades arrestaron a un hombre en la localidad de Santa Rosa del Conlara, provincia de San Luis, bajo la acusación de haber enterrado el cadáver de su suegra en el patio de su casa. La motivación detrás del macabro acto habría sido continuar cobrando la pensión de jubilación de la fallecida.

Hallazgo y confesiones

El cuerpo fue descubierto por la policía en el jardín de la vivienda compartida por la hija de la mujer fallecida y su yerno, Jorge Gaguini, quien fue identificado como el principal sospechoso. Según las declaraciones de los familiares, la mujer murió en abril de 2024. Sin embargo, en lugar de informar a las autoridades sobre su deceso, decidieron ocultar el cuerpo para seguir percibiendo su pensión. Gaguini confesó haber enterrado a su suegra debido a la falta de recursos para costear un funeral o cremación.

Según comunicaron desde el Ministerio Público Fiscal provincial, el hecho trascendió luego de que personal del Departamento de Homicidios de Concarán, a solicitud de la Fiscalía de Instrucción Nº 2 de la Tercera Circunscripción, se presentara en el domicilio de la pareja, en el que se encontró sepultada a la progenitora de la mujer, identificada como Blanca Esther Provenza, de 93 años.

Investigación y resultados

El fiscal César Hugo Salazar Molina, a cargo de la investigación, ordenó la realización de una autopsia para determinar la causa de la muerte. Los resultados confirmaron que la mujer falleció por causas naturales, descartando la posibilidad de un homicidio. No obstante, la pareja enfrenta ahora cargos por defraudación al Estado, ya que continuaron recibiendo los pagos de la pensión tras la muerte de la beneficiaria.

Reacciones y consecuencias

El caso generó un amplio debate sobre la precariedad económica y los sistemas de bienestar social en el país. Gaguini justificó sus acciones alegando que carecían del dinero necesario para cumplir con los deseos funerarios de la mujer, y añadió que la situación económica agravada por las condiciones médicas de su esposa les dejó sin alternativas.

Las indagaciones seguirán su curso, y aunque las autoridades determinaron que no hubo un crimen violento, la pareja podría enfrentar serias repercusiones legales por el intento de engañar al sistema de pensiones.

El fiscal Salazar Molina subrayó que, aunque la causa del fallecimiento ha sido esclarecida, el enfoque ahora es el fraude cometido contra las pensiones, destacando la gravedad de aprovecharse de los beneficios estatales de manera indebida.

Esta situación no solo puso en evidencia las carencias económicas de ciertas familias, sino también la necesidad de revisar los mecanismos de control sobre el cobro de pensiones en Argentina.

La comunidad local ha expresado su conmoción ante los hechos, reflejando la complejidad de las circunstancias que llevaron a este desenlace y la importancia de un sistema que pueda prevenir situaciones similares en el futuro.