Un hombre en Quilmes, Argentina, asombró a los empleados de una morgue al llevar el cadáver de una mujer de 84 años con la que había estado viviendo, a pesar de su fallecimiento.
Utilizando una silla de ruedas, transportó el cuerpo por las calles hasta llegar al recinto forense, donde los empleados alertaron a la policía sobre el extraño suceso.
En la morgue, el hombre, de 63 años, reveló que había compartido vivienda con la mujer durante los últimos tres días.
Sin embargo, no explicó por qué no informó sobre su fallecimiento a las autoridades o servicios médicos.
La fiscalía local ha iniciado una investigación para determinar la causa de muerte de la mujer y averiguar por qué no se notificó su deceso.
Se sugiere que el hombre podría estar experimentando problemas mentales, aunque los primeros indicios apuntan a que la mujer murió de un infarto.
Sin embargo, se continuarán las pesquisas para esclarecer completamente el caso.