Las respuestas siempre están dentro de ti. Para eso está el espacio. Para darle a tu mente un descanso de correr en su rutina de forzar tu vida a existir. Déjame decirte algo. 

Enfócate en tu sentir, reflexiona tu ser y verás como las respuestas saldrán de ti mismo.

No tienes que decidir.

No tienes que forzar.

No necesitas más respuestas. Necesitas más preguntas.

Necesitas más espacio.

Cuando tienes espacio, vuelves a sintonizar con tu cuerpo. Te vuelves a sintonizar con tu corazón. ¿Cómo sería salir de tu cabeza y dejar que la vida fluya a través de ti?

Da mucho miedo, lo sé. Solía ​​pasar horas al día preguntándome si él era el correcto. O, si debo tomar una decisión muy radical. Me golpeaba el cerebro con preguntas y rabia porque no sabía.

Porque, tu cabeza NO sabe. Cuando te dices a ti mismo que tienes que decidir en este momento, no estás tomando la decisión. No estás viviendo en un espacio libre para dejar que las respuestas vengan a tu mente. 

Entra en tu poder. Entra en tu corazón. Te lo prometo, cuando salgas de tu cabeza y entres en tu corazón, todo lo que siempre has querido se puede encontrar aquí.

Porque es la esencia de ti.