La pareja conformada por la influencer Guadalupe Villalobos, mejor conocida como Lupita TikTok, y el conductor de transporte público Ricardo Medellín, ha estado bajo el escrutinio público desde mucho antes de que su bebé fuera hospitalizada por deshidratación. Sin embargo, la reciente confesión del padre de familia durante un podcast ha encendido las alarmas y la indignación en redes sociales y entre organismos de protección infantil.

En un episodio del programa El Rincón del Podcast, Medellín, de 46 años, fue interrogado sobre las críticas que ha recibido por la notable diferencia de edad con Lupita, de 22. Aunque el tema ya era polémico por sí solo, la conversación dio un giro preocupante cuando el entrevistado recordó sin filtros que, a sus 39 años, también tuvo una relación con una adolescente de 14.

«Es que a ella (Lupita) la miran como si fuera de 14 años, yo tengo 46. Bueno, yo cuando tenía 39 me casé con una de 14 también», declaró Ricardo, dejando boquiabiertos a los conductores, quienes incluso interrumpieron la charla para confirmar lo que acababan de escuchar.

Tras percibir la tensión en el ambiente, Medellín intentó corregirse: “Cuando tenía 29”. Sin embargo, sus propios cálculos lo contradicen. El hombre afirmó que su hijo mayor, fruto de esa relación, tiene ahora 16 años. Esto implica que, en efecto, lo engendró a los 39 años, reafirmando así su declaración inicial.

Este tipo de relación, en la que un adulto mantiene vínculos sexuales o afectivos con menores de edad, podría encuadrarse legalmente como estupro, un delito que castiga el aprovechamiento de la inexperiencia o inmadurez de adolescentes para fines sexuales. La gravedad de su confesión ha generado un nuevo nivel de indignación en redes sociales, con usuarios exigiendo a las autoridades investigar de inmediato.

Hospitalización de su hija agrava la controversia

El escándalo estalló en un contexto aún más delicado: la hospitalización de su hija recién nacida, Karely Yamileth, el pasado 27 de abril, debido a un cuadro de deshidratación severa. El caso llamó la atención del Sistema DIF Capullos de Nuevo León, encabezado por Mariana Rodríguez Cantú, quien rápidamente anunció una investigación oficial por posible negligencia parental.

Rodríguez, en sus redes sociales, expuso que el DIF detectó signos de descuido en el cuidado de la menor, además de la presencia de un presunto “tema de consumo de sustancias”, lo que calificó como inaceptable e intolerable en el entorno de una bebé.

Ante la situación, el organismo está considerando reasignar la custodia de la pequeña a otros familiares, mientras se define si será resguardada en el centro Capullos.