En la ciudad de Reynosa, Tamaulipas, la navidad adquiere un significado especial gracias a la labor de un hombre conocido como Don Dago, quien ha convertido su negocio de elotes en un verdadero oasis de esperanza para los niños más vulnerables de la comunidad. Con su iniciativa «Juguetes por elotes», este generoso vendedor recolecta juguetes para regalar en Nochebuena a niños hospitalizados y familias de escasos recursos.
La inspiración detrás de este noble proyecto surge de una experiencia personal que marcó la vida de Don Dago. Él mismo experimentó de cerca las dificultades de pasar largas temporadas en un hospital, lo que lo llevó a decidir dedicar su tiempo y esfuerzo a brindar momentos de felicidad a aquellos que enfrentan situaciones adversas, especialmente los niños.
Una campaña que trasciende fronteras
Lo que comenzó como un acto de bondad local ha trascendido fronteras y se ha convertido en una campaña que llega a distintos estados de México. Cada año, Don Dago visita comunidades marginadas en Nuevo León, San Luis Potosí y Tamaulipas, llevando consigo no solo juguetes, sino también alimentos para aquellos que más lo necesitan.
Para aquellos que deseen unirse a esta hermosa causa, el carrito de Don Dago se encuentra ubicado en el bulevar Espuela y Tonga, en la colonia Sierra de la Garza. Además de colaborar con la donación de juguetes, los visitantes pueden disfrutar de un delicioso elote preparado con los ingredientes más frescos y apoyar de esta manera la admirable labor que realiza Don Dago.
En esta época de compartir y dar, Don Dago demuestra que no se necesita ser grande ni tener mucho para hacer una gran diferencia en la vida de los demás. Su ejemplo de generosidad y solidaridad nos invita a reflexionar sobre el verdadero sentido de la navidad y la importancia de ayudar a aquellos que más lo necesitan.